Juan Carlos Domínguez
VERDADES INCÓMODAS
Ya entrados en confianza con la expositora Lydia Cacho, que trató el tema de las redes de impunidad y corrupción en nuestro país durante la reunión mensual de COPARMEX, algunos empresarios tijuanenses se pusieron elocuentes. Por ejemplo, Ignacio Calderón Tena le mencionó que las administraciones municipales panistas han propiciado la apertura indiscriminada de bares por toda la ciudad, en especial en las zonas marginadas de Tijuana (seguramente le faltó ver todos los que están sobre Bulevar Aguacaliente, Calle Sexta, Colonia Cacho, Playas, etc.), “y si no pregúntenle a ‘Tito’ Quijano”, reviró. Éste acusó que durante la gestión de Jorge Ramos, se entregaron 70 permisos para abrir antros (seguramente se quedó corto). Luego surgió un dato incómodo: 62 por ciento de los bares y cantinas son propiedad de la delincuencia organizada. Entre la concurrencia se encontraban funcionarios del PAN, como Cuauhtémoc Cardona Benavides, secretario de Gobierno en Baja California, y Enrique Méndez Juárez, ex secretario de Gobierno (la oficina que negocia con los giros negros), precisamente en la administración de Ramos. Muy calladitos se quedaron los señores, apenas si tragaban saliva. Como ocurrencia, Cacho propuso darle más poder a los síndicos municipales, y más de uno -incluyendo a panistas- saltó de la silla: “’Uta, darle más poder a síndicos como Héctor Magaña en su momento, ¡se acaba Tijuana!”.
Muy tristes andan en el equipo de campaña de Carlos Barbosa, candidato del PRI para diputado del distrito 4, especialmente Juanita Pérez Floriano, encargada de pasar el “bote”, porque el padrino Jorge Hank Rhon se ha hecho ojo de hormiga y no ha brindado apoyo ni recursos para el allegado. “De por sí es duro para soltar”, refieren del zar de Caliente. Cuentan que precisamente por eso, Gregorio Barreto -otro zar, pero de las calafias- se abrió de la contienda contra Barbosa, porque al pedirle ayuda el gordo Barreto al ingeniero Hank, éste le respondió: “No me ocupas”. Y le recordó que en la contienda pasada le recomendó que no participara; no obstante, Barreto desobedeció y obtuvo la diputación local, por eso el reproche: “ganaste sin mí, no me ocupas”. Y nomás le dio su bendición, como también nomás se la quiere dar a Barbosa.
LIMÒN DESPRECIADO
La mentada “gira del agradecimiento” de Doña Josefina Vázquez Mota no es para todos los panistas, y si no, que lo cuente Alberto Limón, precandidato a diputado por el Distrito 5. Bien puesto para recibir las gracias de la candidata presidencial, y sobre todo para cachar la foto digna del mejor perfil en Facebook, Limón y sus secuaces se postraron a la entrada de un domicilio en el exclusivo fraccionamiento Puerta de Hierro (propiedad el empresario Alfonso Martínez), donde permanecieron por más de dos horas, soportando el gélido clima del lunes 13 de febrero. Ni el anfitrión de la casona los invitó a pasar, ni Josefina volteó a verlos. Tuvo que conformarse el aspirante a tratar de obtener la foto entre la bola, en el evento de acarreados que más tarde celebraría Vázquez Mota en el Auditorio de Tijuana. Por lo menos ya más calientito Limón… y con foto de colado.
ACOSO
Alta, casi un metro ochenta de estatura, tez morena clara, pelo largo crespo, guapa la dama, fue asistente de Javier Algorri, secretario de Seguridad Pública durante la administración de Jorge Hank. Una vez el PRI de regreso en el gobierno municipal, la joven señora “María” (nombre ficticio para proteger su identidad), casada y madre de familia, por cierto, nuevamente fue contratada para ocupar un puesto en la burocracia, concretamente en la Dirección Jurídica del XX Ayuntamiento de Tijuana. Ahí permaneció hasta hace tres semanas. Ya no aguantó más. Presentó su renuncia y, desconsolada, argumentó hostigamiento y acoso sexual. Cuando pidió cambio de puesto, una vez más la respuesta común: “Está bien, pero… ya sabes…”. Y ésa es la tónica en el área jurídica, denunció.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario