8.4.10

CARLOS RODRÍGUEZ:
VOY POR EL VOTO DE LOS PANISTAS LIBRES”

Busca ser candidato a la diputación por el distrito 8

Llama la atención lo primero que plantea Carlos Rodríguez cuando se le cuestiona su interés para ser diputado del PAN por el distrito 8: Que los gobiernos han destinado muchos recursos para la Zona Este de Tijuana, mientras que colonias en su demarcación, con 30 ó 40 años no tienen ni pavimento.
Pero ése es sólo uno de los planteamientos que concentra en su propuesta que tituló “Ocho por el ocho”. Antes tendría que ganar la elección interna del 11 de abril, en la que se enfrentará contra Manuel Gónzalez Reyes –hermano de “Chuy”, el mayor operador dentro del partido– y Raúl Soria Mercado –antes chuyista, ahora castañedista.
Aunque con sólo 33 años de edad, Carlos Rodríguez ha ocupado puestos en todo los niveles del partido y en la administración pública. Solamente por mencionar los cargos a nivel federal, ha ocupado posiciones directivas en la COFETEL (Comisión Federal de Comunicaciones), CONADE (Comisión Nacional de la Cultura Física y Deporte) y la Secretaría de la Función Pública. Presume su trayectoria profesional y académica a nivel de post grado, así como su militancia en el PAN desde 1995.
Es la primera vez que Rodríguez busca un cargo de elección popular y dice merecerlo, pues ya otros la han buscado repetidamente, por lo que considera que la gente está cansada de ver las mismas caras: “Muchos la han pedido una, dos, tres, cuatro veces y muchas de las veces las expectativas no se cumplen. No nos va alcanzar solamente el logo del PAN para ganar, tenemos que generarle a la gente nuevas ideas”.
Consciente de que si bien es campaña interna la que traen los precandidatos, los electores ya están calibrando quiénes podrían llegar al poder, el joven aspirante plantea entre sus promesas el institucionalizar la imagen de todos los ayuntamientos, para que cada vez que cambien una administración no se gasten millones y millones de pesos en cambiar fachadas de delegaciones, papelería, patrullas y todas esas cuestiones; crear el un instituto estatal de transparencia; entre otras.
Pero como ya se dijo, antes tendrá que vérselas con Raúl Soria Mercado y Manuel Gónzalez Reyes, que buscan la misma candidatura y mismo escaño en el Congreso: “Cada uno ha estado en sus trincheras”, acota prudente. Luego la suelta en el mismo tono: “Pero también habemos otras personas que requerimos también esas trincheras para igual mostrarnos a la gente”.
Respecto a la fuerte influencia que ejercen al interior del PAN los González Reyes, Rodríguez se ampara en él mismo: “Yo estoy haciendo una campaña de contraste si ves a mis compañeros. Lo importante es contraste; contrastar trayectorias, perfiles, oportunidades, logros”.
Y confía en el proceder de la militancia panista: “Gracias a Dios todavía tenemos la oportunidad de votar de forma secreta y libre. Yo voy por esos panistas libres y conscientes que reflexionan en esos cinco segundos antes de votar”. Argumenta que ha platicado con 260 panistas uno por uno, visitándolos en su casa; no con fiestas ni carnes asadas, sino escuchándolos hasta por una hora. De ellos ha escuchado reclamos sobre precandidatos que buscaron el voto de la militancia pero luego la hicieron a un lado. Sin embargo alaba la gestión actual de Adriana Sánchez y Óscar Arce, actualmente legisladores local y federal respectivamente, “pero ha habido otros que les ha costado regresar y voltear a ver a la cara”.
Él solito lo saca a colación, jura que no pertenece a ningún grupo dentro del PAN, sino a todos. Igualmente, y siempre avezado para la oratoria, asegura que no está del lado de ninguno de los precandidatos a la alcaldía, pero “por supuesto, tenemos nuestras afinidades, pero no quiero iniciar un proyecto con otro…”, concluye el que por cierto suele utilizar mucho el “me queda muy claro”, al estilo del aspirante Carlos Torres.

(Juan Carlos Domínguez)

7.4.10


HERNÁNDEZ TOVALÍN:
QUE SE RESPETEN LAS REGLAS DEL JUEGO”

Precandidato del PRI a la alcaldía de Rosarito podría irse a otro partido.

A la vieja usanza priísta, con acarreo de colonos y repartición de comida, el precandidato a la alcaldía de Rosarito, Javier Hernández Tovalín, celebró acto con militantes y simpatizantes en el Parque Abelardo L. Rodríguez. “A Tovalín no lo cambio por nada”, gritaba el maestro de ceremonias que también amenizaba con cumbias y música sinaloense, mientras que las familias llevadas en camiones también disfrutaban de hot dogs y mole poblano.
Hernández Tovalín es uno de los tres precandidato del PRI. Los otros son Javier “Tito” Robles Aguirre, apoyado por la CTM y el sector juvenil; y un tercer aspirante que dicen registrado pero que nadie a ciencia cierta sabe quién es: “Únicamente he visto que somos dos los que hemos hecho la precampaña”, externó a ZETA el precandidato.
Hernández Tovalín tiene de su parte el apoyo del actual presidente municipal rosaritense, Hugo Torres; pero también ése ha sido su talón de Aquiles, pues carga con el resentimiento de un gran sector de los priístas en Rosarito que se sienten “mal tratados”, por el alcalde Torres. Asimismo, Hernández Tovalín ha impugnado la convocatoria del PRI para registrar precandidaturas por considerar que estaba “plagada de lagunas”. Está a la espera de que se subsanen los inconvenientes para su triunfo en la interna: “Si se resuelve esto podemos decir que estamos en igualdad de circunstancias que todos mis compañeros. Y si no se resuelve, pues ya veremos qué otras instancias haremos”.
En el acto, el precandidato y ex secretario de gobierno en el actual Ayuntamiento de Rosarito, presentó a su planilla: Rodrigo Montes, Francisco Bautista, Linda Pimentel, Ricardo Bejarano, Mario Enrique Hernández, Rubén Olachea. Sus simpatizantes refirieron a este semanario que él va a ganar la contienda interna contra Javier Robles Aguirre (ex Jefe de enlace de Relaciones Exteriores) si es que “hacen las cosas bien; somos de los priístas honestos”.
Respecto a la posibilidad de que Javier Hernández Tovalín se candidatee como alcalde del PRD o el PT-Convergencia si es que se siente fraudeado en la elección interna del PRI, su equipo advierte: “Queremos ganar pero bien, con votos”. Mientras tanto el propio Tovalín corrobora: “Sí he tenido la oferta en otros partidos, pero ahorita estoy como precandidato de mi partido y pienso seguir así. Tengo confianza en que el partido realmente sí haga los cambios necesarios. Que se tome en cuenta a los ciudadanos que se quedaron sin votar y que salga esto adelante; a final de cuentas el enemigo es el PAN”.
El precandidato de quien desde un inicio se manejaba que contaba con el respaldo de Fernando Castro Trenti, Jorge Hank y el alcalde Hugo Torres, apeló durante su acto por que las cosas “se hagan respetando las reglas del juego”. Repitió aquello de que los priístas deben estar unidos para salir fortalecidos hacia las elecciones del 5 de julio: “La responsabilidad de la nueva imagen del nuevo PRI que estamos pregonando a nivel nacional, no podemos dejar que en un municipio o en un estado se eche a perder…”.

(Juan Carlos Domínguez)

JAVIER CASTAÑEDA:
“NO DECLINARÉ POR NINGUNO DE LOS OTROS PRECANDIDATOS”

Dice contar con más votos de la gente en la calle para ganar la elección externa; niega mantener bajo perfil y hacerla de “comparsa” a otros.

Ha mantenido tan bajo perfil todo el tiempo desde que se le menciona como aspirante y ya en precampaña, que Javier Castañeda, aspirante a candidato del PAN por la alcaldía de Tijuana, para muchos es como el tercero en discordia que al final declinará por alguno de sus dos contrincantes. Él lo niega categóricamente, dice que no será comparsa de nadie. Si ha estado huidizo de los medios es que se ha concentrado exclusivamente en el proselitismo con la militancia, argumenta. Se siente muy apto para ganar y aventajado sobre Carlos Torres y Alejandro Monraz pues gracias a los cargos que ha ocupado, dice, lo han compenetrado con la comunidad más que los otros. Aunque por un lado niega juegos sucios en las elecciones panistas –en las que alguna vez perdió frente a Jorge Ramos– por otro lado es muy reiterativo en que las dirigencias del PAN estén muy atentas a la elección para que sea limpia y transparente. Por un lado dice que las reclamaciones y demandas son de los militantes y no precisamente de los precandidatos, respecto a una imposición para elegir candidato. No obstante, en una sola frase sintetiza lo que su discurso oficial no profundiza: “No podemos tapar el sol con un dedo”.


—No había candidato del PAN, pero ya tenían planilla de unidad; ¿realmente es de unidad?
“Consideramos prudente presentar una propuesta única de planilla, no solamente en el ánimo de la unidad, sino que se vieran reflejados los liderazgos de los cuatro que en ese tiempo pretendíamos participar, con algunas otras figuras en el PAN que para nosotros era importante que estuvieran participando”.

— ¿Cómo ves tus posibilidades de lograr la candidatura?
“Muy buenas, estamos apostando a la unidad del partido. Yo no voy a confrontarme con ninguno de mis dos compañeros precandidatos, ambos representan un liderazgo importante del PAN, vamos a trabajar de las manos con los dos. Creo que las posibilidades mías son muchas porque yo cuento con una cantidad de votos ya consolidados, que están por convicción conmigo más que por cualquier otra circunstancia. Y también creo que las segundas opciones me favorecen ahí con ambos equipos”.

—Está contienda interna panista es más difícil que incluso la elección constitucional. ¿Cómo ves las condiciones para llegar a la convención?
“La interna es siempre una lucha de voto por voto, porque los militantes tienen su propia opinión sobre las cosas, su propio criterio, cada voto cuenta y no somos muchos, somos 1976, tenemos que hacer un esfuerzo por convencerlos. Es una contienda compleja y muy dinámica, tenemos que estar muy al pendiente de cómo se dan las cosas en el proceso interno para que verdaderamente se exprese un sentir democrático de la mayoría. No por unanimidad, porque aquí no va haber unanimidad, como en otras partes; aquí hay mayoría simplemente a favor de alguien”.

—A diferencia de Alejandro Monraz y Carlos Torres a ti se te vio más alejado de los medios, con bajo perfil, ¿por qué esa actitud?
“Mi dinámica es estar un poco en el interés de los miembros activos. Lo más importante es convencer a la mayoría de la gente que está al interior del partido. La parte externa va a tener su momento a partir de mayo. Yo afortunadamente tengo la ventaja de conocer a mucha gente en la calle y cuento con una estructura social que me ha apoyado mucho cuando he sido candidato en tres ocasiones anteriores, y lo he estado reforzando a través de mi trabajo permanente con la comunidad. Esa parte yo la tengo superada, en el momento que ser requiera vamos a echarla a funcionar”.

— ¿No te has estado manejando como en tercera posición para finalmente declinar por alguno de los otros dos precandidatos?
“No, yo no voy a declinar a favor de ninguno de los dos precandidatos. Lo he dicho, no voy aceptar ninguna otra encomienda que no sea trabajar en la campaña constitucional por el PAN. Lo he dicho infinidad de veces, no vamos a estar haciendo ninguna comparsa”.

—En la elección interna pasada no fuiste favorecido. ¿Qué diferencia hay entre las condiciones de la elección del 2007 y esta del 2010?
“En aquel tiempo nosotros no éramos gobierno en el municipio, teníamos que trabajar en un discurso que nos diferenciara de lo que estaba ocurriendo en aquella administración, estábamos trabajando mucho en convencer otra vez a la militancia, de animarlos, motivarlos para salir a la calle y recuperar la alcaldía de Tijuana. Ahora somos gobierno, debemos trabajar de una manera diferente, ver sus fortalezas, ver lo que le falta”.

—Pero en los aspectos meramente internos del partido, ¿fue una elección trasparente? ¿Te ganaron bien?
“Sí fue una elección trasparente, se dieron las condiciones. Igualmente esperamos que en ésta las condiciones sean igualitarias y que las oportunidades estén trazadas claramente, se lo hemos solicitado mucho a la dirigencia del partido, que es la que tiene una injerencia directa en el proceso. Estamos muy a la expectativa vigilando que todos cumplamos con esa parte”.

—En el debate Monraz y tú fueron muy reiterativos en pedir transparencia, democracia, no imposición. ¿Se puede dar la imposición? ¿Hay imposición?
“No, no hay. Porque si hubiera una imposición, pues no hubiera ahorita convocatoria para participar. Independientemente de esto lo que yo pretendo es que haya una imparcialidad por parte de todos, que así lo hemos visto, pero queremos que continúe hasta el 11 de abril. Por eso hablamos de favorecer toda condición democrática dentro del PAN. Si hay algún resquicio por ahí, alguna situación de inconformidad, queja, denuncia de alguno de los militantes con respecto a la falta de equidad, la Comisión Estatal de Elecciones que se integre a un trabajo pleno de seguimiento a la elección de Tijuana. El PAN siempre ha sido muy reiterativo de exigirlo hacia afuera, con más razón lo deber exigir hacia dentro”.

—Este pronunciamiento tuyo fue el que caldeó los ánimos en el debate.
“Se paró una compañera miembro activo del noveno distrito, la señora Vences se para a decirme que yo me había vendido por un millón de dólares, aparte de groserías que lanzó; es una simpatizante de mi compañero y amigo Carlos Torres, muy desafortunada la intervención de esta persona porque no refleja el grado de civilidad política que el PAN nos ha enseñado. Espero que la dirigencia tome cartas en el asunto, porque precisamente son las cosas que no debemos permitir en el partido; es vergonzoso. Nos hace quedar mal a la vista de los tijuanenses”.

—Respecto al tema de los “golpes bajos” dentro del PAN; en entrevista con ZETA Alejandro Monraz los reconoce; mientras que Carlos Torres se avala con las reglas y estatutos del PAN; ¿tú qué tienes que decir la respecto?
“Mira, no podemos tapar el sol con un dedo. Hay quejas, no podemos dejar de reconocerlo. Hay inconformidades, y es claro que si no las tenemos los precandidatos, las tienen la militancia. Es importante que se atiendan, porque si no, nos podemos descarrilar”.

— ¿Si no te favorece el voto de los panistas, qué postura vas asumir?
“Vamos a trabajar por el PAN. Vamos a trabajar en el rol que nos toque jugar en la campaña”.

—Si las circunstancias ameritan que declines a favor del alguno de los otros precandidatos ¿por quién lo harás?
“No voy a declinar bajo ninguna circunstancia por alguno de los otros dos precandidatos. Vamos a estar hasta el final y vamos a esperar los resultados. Entonces pues, no puedo responder a eso porque realmente no voy a declinar.”

— ¿Entonces tu simpatía o afinidad es igual para Torres que para Monraz?
“Claro, claro, para cualquiera de los dos compañeros. Yo los apoyaría incondicionalmente a cualquiera de los dos que resulte ganador. Sé que son buenas opciones para el PAN en la calle”.

— ¿El debate que tuvieron en qué cambia el desarrollo de la precampaña y rumbo al 11 de abril?
“En lo particular de mí, que presenté propuestas concretas de trabajo. Fui muy claro en mis contenidos, sé cómo está la administración municipal, hay cosas que se quieren echar a andar pero que ya están hechas y que hay que fortalecerlas. Presenté propuestas con cifras y datos muy claros de lo que es Tijuana. Eso cambia en el sentido de que la percepción es positiva hacia tu servidor de parte de los militantes”.

—Da un mensaje para la militancia y otro para los ciudadanos en general:
“Para el panista yo te diría que para mí lo más importante es que esta lucha democrática la veamos como un esfuerzo de todos. Y que se motiven a seguir participando, que no se desanimen bajo ninguna circunstancia. Y a los tijuanenses que estén muy a la expectativa, que traemos una contienda a veces caldeada, a veces con los ánimos un poco apasionados y con mucha fuerza, que revisen quién está haciendo una verdadera campaña democrática como la está haciendo el PAN”.
El lunes cuando acabó el debate, en el festejo sobre la tarima de un lado estaba Carlos Torres, y del otro tú y Alejandro Monraz. ¿Hay mensaje en esa imagen?
“Bueno, yo me puse en un lugar y Monraz llegó a donde yo estaba. Eso también refleja una simpatía por alguien. A mí me agrada esto, me hubiera gustado que Carlos también se integrara. Al final fui y le levanté las manos a ambos y me puse en medio de los dos, ¿por qué?, porque yo busco la unidad de los tres, y, ¡bueno!, al venir Monraz a mi lugar también reflejó que él busca unidad y yo hubiera esperado lo mismo de Carlos; él estaba por ahí con unos tambores bailando, ése fue su final, respeto la decisión que tuvo. Yo creo que ahí se reflejan algunas cosas y eso yo lo dejo a la imaginación… más bien a la reflexión de los panistas”.

(Juan Carlos Domínguez)