29.8.12

El agasajo de los chiles en nogada

Juan Carlos Domínguez


Un agasajo para los tijuanenses, y para nuestros visitantes, fue el Festival del Chile en Nogada, que se realizó el domingo pasado en la avenida Revolución.

Aunque de origen poblano, este tradicional platillo mexicano se ha ido sumando a la gama gastronómica de Baja California y ha seducido el gusto de los comensales locales.

El chile en nogada es de preparación compleja y muy elaborada, que además del chile poblano, puede incluir hasta 50 ingredientes, siendo los principales la carne de res o puerco, nuez, granada, piñones, pasas, queso, crema... en fin, un platillo que concentra la diversidad y riqueza de la gastronomía mexicana, además de su colorido porque visualmente el chile en nogada refleja los tres colores de nuestra bandera, el verde del chile, el rojo de la granada y el blanco de la crema.

El manjar data del año 1821, cuando unas monjas poblanas lo crearon para agasajar a Agustín de Iturbide, y hoy conforma del menú principal en la celebración del 16 de septiembre en algunas entidades del país.

El Tercer Festival del Chile en Nogada, fue la ocasión especial para que aquellos que no habían sido seducidos por este platillo, pudieran saborearlo a un precio que estuvo muy por abajo del precio que suele tener en los pocos restaurantes que lo preparan en la entidad.

Aparte del Restaurant 100 Años, organizador del evento, el público pudo elegir entre 7 restaurantes más que lo ofrecieron ese día. Para quien lo prefirió, también hubo paella, pizzas, sushi, postres; pero el rey ese día, fue el chile en nogada que pudieron acompañar con vino, cerveza o refresco.

Fue un evento completamente familiar, con números artísticos y área de juego para niños, sin costo de entrada al evento, que además fue a beneficio del DIF Municipal. Y la gente estuvo tan "entrada" con los chiles, que ni el "enjambre" te temblores que tambaleó a la ciudad ese día sintieron.











26.4.12

-¿¡Haz oído eso de que los caballeros no tienen memoria?
-Sí
-Ah pues yo soy igual que ellos

Diálogo entre Galilea Montijo (que debe andar en los 40 años) y una niña como de 3. En un promocional del programa televiso "Pequeños Gigantes".


1.3.12

UN POCHO SUELTO EN LA CAPIRUCHA

Daniel Hernández reúnes crónicas en "El Bajón y El Delirio"


Juan Carlos Domínguez


La Ciudad de México, inspiración de tantos, vuelve a ser motivo de análisis. De auscultación en plan lúdico; desde la vagancia y el desmadre, pero no por ello desprovisto de reflexión.

“El Bajón y El Delirio”, es el título que resume las crónicas de un joven mexicoamericano –“pocho”, como les dicen– radicado en California, que llegó a la capital mexicana, quizás con el consabido cliché de buscar sus raíces, para finalmente encontrarse con una serie de submundos citadinos, que terminaron por conquistarlo.

Nacido en 1980 en San Diego, California, graduado de Literatura en la Universidad de California en Berkeley y periodista de medios como The Angeles Times y L.A Weekly, Daniel Hernández, que toda su vida la había transcurrido en la frontera San Diego-Tijuana, decidió tomarse el verano de 2002 para conocer el Distrito Federal y otros estados como Oaxaca, Puebla, Veracruz y Guanajuato. Y desde entonces quedó atrapado por la cotidianidad chilanga.

Regresó en varias ocasiones, una de ellas para cubrir las elecciones de 2006. Y ya para quedarse en plan más largo, desde el 2007, como redactor de Newsweek. Alguna editorial neoyorkina leyó sus crónicas desde México y le ofrecieron escribir un libro entero sobre la Ciudad de México, su cultura y vida cotidiana, desde una perspectiva personal. “Down and Delirius” se tituló la obra publicada originalmente en inglés, que después interesó al editor Guillermo Osorno para traducirlo y publicarlo en nuestro país a través de la editorial Océano.

Recién salido de la imprenta, “El Bajón y El Delirio”, es un recorrido que el lector, de la mano del autor, hace por los ritos, las costumbres, los dilemas, la vida nocturna, la vocación festiva, las broncas urbanas y todos los mundos que se entretejen entre los 20 millones de capitalinos que se disputan la sobrevivencia en el D.F. Es un relato vivaz el de Hernández, sin abandonar el rigor periodístico, la tarea reporteril.

“Es una carta de amor a la ciudad”, dice en plan romántico el autor, que en su ir viviendo la urbe y conociendo a sus tribus, pasa del asombro a la asimilación, de la reserva a la entrega total.

El autor lo mismo nos adentra en la cultura glamorosa de la colonia Condesa que en las fiestas de los sonideros y toquines de la banda en Neza o Tepito. Los raves o la vanguardia de la moda y vida nocturna, o la suciedad y arbitrariedad en el Mercado de Sonora. Los rituales del vulgo para la Santa Muerte o San Judas Tadeo, que a los funerales de pipa y guante en el panteón francés. Convivimos lo mismo con punk, emos, roqueros añejos, darkies, y todas las especies habidas y por haber. La Roma, la Merced, Coyoacán, Garibaldi, la Guerrero, Teotihuacán; el viaje por el que nos lleva Daniel Hernández es vertiginoso, como el de un pesero repleto de pasajeros, cada uno con un universo por compartir.

En medio de tanta fiesta, el periodista que escribe este libro también profundiza en los fenómenos del secuestro, la violencia, la contaminación, el narco, la intolerancia y hasta el esoterismo que intenta explicar cómo la Ciudad de México puede sobrevivir a pesar de tanta calamidad, caos y excesos.

Aclara Daniel que su libro no es un catalogo de la capital, “no es una guía, no es una enciclopedia, no es un trabajo de antropología. Son crónicas, es un reportaje”.

El primer texto que se lee en “El Bajón y El Delirio” es “Guadalupanos pachecos”, el primer hecho que lo inspiró al radicar en México, cuando le tocó asistir a una peregrinación a la Basílica de Guadalupe, en donde también se volvió amigo de una “bandita” de jóvenes de barriada. Esa madrugada regresó a su casa e iluminadamente escribió de un tirón esa primera crónica.

Daniel Hernández, quien en primera instancia escribió este libro penando en el público anglosajón, que ve a México más que nada como a un destino político, también tuvo que salvar el prejuicio de sus propios padres mexicanos, quienes no le recomendaban aventurarse hacia este lado de la frontera: “Me decían: te van a robar, te van a secuestrar, te van a chamaquear, te va ir mal, es muy feo, es muy sucio, la gente no es amigable, son difíciles, son chilangos”. Pero lo mismo que en el Distrito Federal se encuentra en Los Ángeles que en Nueva York, París o Londres, defiende el periodista: “Esas ciudades te muestran todo lo bonito del ser, y todo lo horrible, feo, desagradable, tóxico, violento y alarmante”.

Al final del día, Daniel Hernández sucumbe a la percepción de un pueblo cósmico, una ciudad mágica que está destinada a canalizar tanta energía humana concentrada en esa mega polis que se revierte en una suerte de protección para enfrentar las más duras adversidades. Una buena fortuna que se puede traducir en la cotidianidad de caminar por años en la “capirucha” sin, por ejemplo, nunca haber sido asaltado. “Mí estrategia es nunca tenerle miedo a la ciudad. Y en las crónicas me voy a zonas donde sí existe un tipo de auto justicia social generalizada dentro de los vecinos, en algunas partes no existe el Estado”.

Y ahí encuentra la riqueza, afirma: “Y en esas zonas hay una cultura, una vibra y una creatividad más bonita, y más intensa, y más auténtica de la ciudad. Y es ahí donde hay esa famosa improvisación mexicana, de hacer la vida con lo que hay, y hallar la felicidad con lo que tengas”.

Joven californiano clase mediero, el autor de “El Bajón y El Delirio”, también encuentra en la capital mexicana, y en el país todo, un ambiente más relajado, donde, por ejemplo, la gente no vive con el temor de ser multado por un policía y te aplique una “ticket de 500 dólares”, y en cambio ves a policías “como postes de luz y es mejor ignorarlos porque la línea entre la delincuencia y la Ley es muy delgada”.

Pero eso es lo que lo conquistó, el contraste de la rigidez de Estados Unidos, que se difumina apenas al cruzar la frontera: “En ese contexto es una parte peligrosa porque se puede producir un caos que no tenga salida. Pero para mí es como, ¡ah!, refrescante, te siente libre, liberado, te sientes con posibilidades sin límite. Y en Estados Unidos es puro límite. México me inspira”.



LA POLÍTICA ALEGRE
Juan Carlos Domínguez


VERDADES INCÓMODAS
Ya entrados en confianza con la expositora Lydia Cacho, que trató el tema de las redes de impunidad y corrupción en nuestro país durante la reunión mensual de COPARMEX, algunos empresarios tijuanenses se pusieron elocuentes. Por ejemplo, Ignacio Calderón Tena le mencionó que las administraciones municipales panistas han propiciado la apertura indiscriminada de bares por toda la ciudad, en especial en las zonas marginadas de Tijuana (seguramente le faltó ver todos los que están sobre Bulevar Aguacaliente, Calle Sexta, Colonia Cacho, Playas, etc.), “y si no pregúntenle a ‘Tito’ Quijano”, reviró. Éste acusó que durante la gestión de Jorge Ramos, se entregaron 70 permisos para abrir antros (seguramente se quedó corto). Luego surgió un dato incómodo: 62 por ciento de los bares y cantinas son propiedad de la delincuencia organizada. Entre la concurrencia se encontraban funcionarios del PAN, como Cuauhtémoc Cardona Benavides, secretario de Gobierno en Baja California, y Enrique Méndez Juárez, ex secretario de Gobierno (la oficina que negocia con los giros negros), precisamente en la administración de Ramos. Muy calladitos se quedaron los señores, apenas si tragaban saliva. Como ocurrencia, Cacho propuso darle más poder a los síndicos municipales, y más de uno -incluyendo a panistas- saltó de la silla: “’Uta, darle más poder a síndicos como Héctor Magaña en su momento, ¡se acaba Tijuana!”.

Barboza con Peña Nieto
LA PURA BENDICIÓN
Muy tristes andan en el equipo de campaña de Carlos Barbosa, candidato del PRI para diputado del distrito 4, especialmente Juanita Pérez Floriano, encargada de pasar el “bote”, porque el padrino Jorge Hank Rhon se ha hecho ojo de hormiga y no ha brindado apoyo ni recursos para el allegado. “De por sí es duro para soltar”, refieren del zar de Caliente. Cuentan que precisamente por eso, Gregorio Barreto -otro zar, pero de las calafias- se abrió de la contienda contra Barbosa, porque al pedirle ayuda el gordo Barreto al ingeniero Hank, éste le respondió: “No me ocupas”. Y le recordó que en la contienda pasada le recomendó que no participara; no obstante, Barreto desobedeció y obtuvo la diputación local, por eso el reproche: “ganaste sin mí, no me ocupas”. Y nomás le dio su bendición, como también nomás se la quiere dar a Barbosa.

LIMÒN DESPRECIADO
La mentada “gira del agradecimiento” de Doña Josefina Vázquez Mota no es para todos los panistas, y si no, que lo cuente Alberto Limón, precandidato a diputado por el Distrito 5. Bien puesto para recibir las gracias de la candidata presidencial, y sobre todo para cachar la foto digna del mejor perfil en Facebook, Limón y sus secuaces se postraron a la entrada de un domicilio en el exclusivo fraccionamiento Puerta de Hierro (propiedad el empresario Alfonso Martínez), donde permanecieron por más de dos horas, soportando el gélido clima del lunes 13 de febrero. Ni el anfitrión de la casona los invitó a pasar, ni Josefina volteó a verlos. Tuvo que conformarse el aspirante a tratar de obtener la foto entre la bola, en el evento de acarreados que más tarde celebraría Vázquez Mota en el Auditorio de Tijuana. Por lo menos ya más calientito Limón… y con foto de colado.

ACOSO
Alta, casi un metro ochenta de estatura, tez morena clara, pelo largo crespo, guapa la dama, fue asistente de Javier Algorri, secretario de Seguridad Pública durante la administración de Jorge Hank. Una vez el PRI de regreso en el gobierno municipal, la joven señora “María” (nombre ficticio para proteger su identidad), casada y madre de familia, por cierto, nuevamente fue contratada para ocupar un puesto en la burocracia, concretamente en la Dirección Jurídica del XX Ayuntamiento de Tijuana. Ahí permaneció hasta hace tres semanas. Ya no aguantó más. Presentó su renuncia y, desconsolada, argumentó hostigamiento y acoso sexual. Cuando pidió cambio de puesto, una vez más la respuesta común: “Está bien, pero… ya sabes…”. Y ésa es la tónica en el área jurídica, denunció.







24.2.12

DE JOSEFINA, PEÑA NIETO Y LÒPEZ OBRADOR:
Lydia Cacho, periodista y activista social.
HAY QUE RESIGNARSE: "SON LOS CANDIDATOS QUE TENEMOS"
Opina la periodista Lydia Cacho

Juan Carlos Domínguez

Tratándose de los candidatos a la Presidencia de la República, por lo menos de los tres principales, como dice el adagio popular, “de los tres no se hace uno”.

Empezando por las damas, Josefina Vázquez Mota, abanderada del PAN, y apelando a la sensiblería de los mexicanos –y las mexicanas– como estrategia de plataforma, en la opinión de Lydia Cacho eso no le bastará para alcanzar el triunfo: “Se está sobrestimando. La noción de equidad de género que hay en México. Seguimos siendo un país bastante machista, no solamente con hombres machistas, sino con mujeres machistas”.

Expone que no se trata de un “asunto mujeril”, “no creo que las mujeres seamos naturalmente buenas y porque eres mujer vas a hacer las cosas mejor”.

Como el tiempo que lleva la mujer en el poder y el servicio público es relativamente poco, refiere que hay pocos casos documentados. Y algunos de ellos los califica como terribles: “Basta ver a Beatriz Paredes para entenderlo, es también como engendro de la misoginia, del machismo y la adopción falsa del discurso feminista para llegar a donde quiere llegar”.

Aunque sí valora que el ciudadano tenga la opción de elegir a una mujer Presidenta sí así lo decide, pues por primera vez hay una fémina con posibilidades reales de asumir la máxima magistratura, “de por lo menos dar la batalla”. Pero “a mí me gustaría que fuera una mujer presidenta más de izquierda, más progresista, con menos vínculos con la Iglesia. Yo creo que México no le dará el voto para la Presidencia. A lo mejor me equivoco”

Por el lado del Revolucionario Institucional, la galanura y fotogenia de Enrique Peña Nieto tampoco la seducen: “No ha demostrado puntualmente que es una vergüenza, pertenece a lo peor del PRI, lo que ya conocemos, lo que llevó al PRI a la situación en la que está. En Quintana Roo, un estado fronterizo con problemas monumentales, vivimos ni más ni menos que a Mario Villanueva como gobernador, que le abrió la puerta al narco en el sur del país. Y Peña Nieto es de esa escuela”.

— ¿Pero los electores se guían más por la imagen, la farándula?

“Yo creo que sí, pero mira, es su estrategia, y vivimos en un país donde la gente se compra las telenovelas, y a lo mejor cree más en las telenovelas que en la vida real. Hay muchas evidencias de la carrera política de Peña Nieto para demostrarnos que si él vuelve, si vuelve el PRI, el país la va a pasar muy mal seis años más, mucho peor de lo que ha pasado”.

Mientras que Andrés Manuel López Obrador el candidato de las izquierdas, y sus nuevos giros conductuales, le generan sentimientos encontrados: “Me sumo a la fila de las y los sorprendidos con este discurso amoroso que parece del 14 de febrero; me tiene muy preocupada”.

Para la periodista Cacho tal discurso le resulta fuera de lógica ante los graves tiempos que atraviesa México: “Yo no quiero que un Presidente me declare su amor y me esté hablando como si fuera un líder eclesiástico o pastor cristiano. Yo lo que quiero es que un candidato venga y diga cuáles son las acciones concretas que va a tomar para llevar a este país a otro lugar”.

Reconoce que el “Peje” es el candidato con la carrera política más limpia, sin actos corruptos que se le sepan, y que su nueva oratoria debe obedecer a una estrategia del PRD para bajar “los negativos” que acarrea el “Presidente Legítimo”. Confía, como muchos mexicanos, que fuera del discurso retórico y cursilón que ahora carga AMLO, se requiere una vuelta de tuerca en caso de asumir las riendas del país. Mientras tanto “no entiendo lo que hizo Andrés con esta campaña del amor y la amistad”.

Así que “este sexenio va a tener que ser necesariamente con los candidatos que tenemos enfrente…”.



23.2.12

LYDIA CACHO:
Cacho, evidenció red de pederastia con políticos involucrados.
"TODO EL PAÍS ESTÁ EN CRISIS"

Perseguida del sistema, la activista social habló de la crisis de ética que se respira incluso en el periodismo. Y de la corrupción e impunidad en los gobiernos de México.



Juan Carlos Domínguez Beltrán

Dedo acusador primero, y después víctima del poder político en nuestro país, la periodista y activista Lydia Cacho no ve a un futuro Presidente de México –sea quien sea éste– enfrentándose contra la corrupción y la impunidad.

De los tres principales candidatos, Josefina Vázquez Mota, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, en torno a este tema, sólo advierte un discurso vacío, pura retórica: “Es como un retroceso, una necesidad de disfrazar la realidad, de hablar como si todo estuviera puesto en un ‘impasse’ porque vienen las elecciones, y como si las buenas intenciones se hubieran ido de vacaciones para el proceso electoral. Eso me parece peligrosísimo”, considera.

Acepta que hoy por hoy, ninguno de los aspirantes a gobernar el país, puede desconocer algún vínculo político o personal con ex gobernantes o funcionarios corruptos, con personajes incómodos: “Ninguno se libra de pertenecer a su propio partido. Y los partidos están haciendo cualquier cantidad de triquiñuelas para llegar a donde están”.

Lo ejemplifica con los procesos de selección de precandidatos en cada estado de la República Mexicana: “No les importa si están vinculados con la delincuencia organizada o no. Lo único que les interesa es si tienen cierto poder económico y habilidades para incidir en sus comunidades, para ganarle votos al partido”.

Así pues, ni el candidato del PRI, ni la del PAN o PRD, dan el ancho para las circunstancias que estamos pasando, “porque se necesitaría que se atrevieran a ‘jugársela’ –incluso la vida– por el país, y no creo que ninguno de los tres esté dispuesto a eso”, acusa.

Cacho, sabedora de las mafias y redes de corrupción en las que funcionarios de todos los niveles de gobierno tienen participación, recién ha publicado el libro “Esclavos del Poder”, donde da cuenta de ello. Al mismo tiempo, en época electoral, su caso ha sido retomado por las autoridades federales, para darle un sesgo político partidista.

Precisamente el 14 de febrero se cumplieron 6 años de que salieron a la luz pública las llamadas telefónicas entre el entonces gobernador de Puebla, Mario Marín, y el empresario Kamel Nacif Borge, donde se evidenciaba el involucramiento y complicidad de éstos en los casos de pederastia y pornografía infantil que Lydia Cacho denunciara en su libro “Los Demonios del Edén”, y que le habrían costado a la periodista que la torturaran y encarcelaran indebidamente.

Ahora el gobierno federal, a través de la Procuraduría General de la República, ha mostrado interés en reabrir el caso, para considerar elementos en contra del ex mandatario Marín, que en su momento descartó la Suprema Corte de Justicia de la Nación. La finalidad evidente no es hacerle justicia a la activista social, sino abonar a la guerra sucia entre el PAN-Gobierno y el PRI-opositor.

“Esa noticia la han estado circulando desde que llegó Rafael Moreno Valle (gobernador de Puebla por la coalición PAN-PRD). Yo lo que sé es que el caso sigue abierto contra Kamel Nacif y Mario Marín, contra los policías que me torturaron y me arrestaron ilícitamente, los expedientes están ahí e involucran a 22 funcionarios”, aclara la también escritora.

Por ellos Lydia Cacho dice estar ya muy grandecita como para no darse cuenta que nuevamente la están utilizando con fines políticos y partidistas: “Yo mientras no vea que en verdad están llevando acciones judiciales concretas con los elementos que tienen en sus manos, pues todo es discurso político”.

No es que esté resignada a ser usada para la guerra sucia partidista, pero Lydia Cacho sabe que ya nada puede hacer: “Si todo queda en una batalla de escupitajos y aventarse lodo; no le voy a entrar, no deberíamos entrarle”.

Además su denuncia la ha canalizado a la Corte Interamericana, justamente porque concluye que de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) no espera nada: “Hay una parálisis intencional por parte de la Fiscalía, no sólo en mi caso, yo soy afortunada de seguir viva, sino por todos nuestros colegas que han sido asesinados o desaparecidos en todo el país, y siguen en manos de esta Fiscalía voluntariamente ineficaz. Y esa misma Fiscalía es la que supuestamente está dispuesta a colaborar contra Mario Marín”.

Impunidad institucionalizada y periodismo en crisis

Muy presente tiene Lydia Cacho cuando en 2006, a unos cuantos días de haber salido de la cárcel, el candidato Felipe Calderón en el arranque de su campaña en Puebla, y a un lado de su coordinadora Josefina Vázquez Mota, le prometió aplicar “toda la fuerza de la Ley” en contra del gobernador Mario Marín.

Pero resulta que los asesores de Calderón resultaron ser los mismos abogados defensores de Marín y Kamel Nacif, precisamente hablando de las redes de corrupción, “así es como funcionan las cosas en el país, y eso es lo que sucedió, le recomendaron al Presidente que era mejor negociar con Puebla, y eso hizo”. A cambio de varias diputaciones poblanas para el PAN en ese año, y cuatro años después la gubernatura.

También Marín fue amparado por la entonces presidenta del PRI, Beatriz Paredes, que en la euforia de una fiesta le prometió protección a cambio también de favores políticos en los que resulta que ahora al “Góber Precioso” todavía le están debiendo una senaduría o diputación plurinominal, lo que sea con tal de recuperar el fuero.

A Lydia Cacho se le han acercado priistas resentidos que apelan a que Mario Marín sea sentenciado, aunque no sabe si lo hacen por verdadero sentido ético o conflicto de intereses, “pero hay una parte del PRI más dura, más añeja, más tradicional, en el que por supuesto está Beatriz Paredes, Emilio Gamboa Patrón, Fidel Herrera, y todos ellos, que están protegiendo a Mario Marín y a todas estas redes porque están vinculados”.

Regresando a la sucesión presidencial, la realidad es que no habrá presidente electo o partido gobernante que logre abatir la impunidad y la corrupción, advierte Cacho: “Este sexenio va a tener que ser necesariamente con estos candidatos que tenemos enfrente. Y con los candidatos que cada estado tiene, porque ésa es otra historia”.

A propósito, como han pregonado algunos aspirantes, aprecia que el sexenio que viene tendrá que ser de la “sociedad civil”, “y lo digo muy en serio, tenemos que lograr un equilibro de poder con los poderes fácticos. En la medida que no haya medios de comunicación más fuertes, más sólidos, reporteros y reporteras que se la sigan ‘jugando’ en la situación en la que estamos, no van a cambiar las cosas”.

Pero ésa es otra cuestión, el actuar de la prensa y los medios de comunicación, las más de las veces comparsa, otras cómplices: “Todo el país está en crisis, y el periodismo en México está en crisis. No solamente estamos perseguidos sino también traemos una crisis de ética tremenda, hay periódicos en todo el país que verdaderamente son parte del problema, y están coludidos con los poderes a quienes critica”.

Como periodista y, sobre todo, como activista social, Lydia Cacho ha despertado el interés de algunos partidos políticos, a diferencia de gente como Isabel Miranda de Wallace, de la que considera que ha cometido errores, o un Javier Sicilia, quien por los menos se ha sentado y dejado seducir por el Presidente, Lydia ha rechazado cualquier clase de ofrecimiento: “No sabes cómo me da risa cada vez que me llaman por teléfono para ofrecerme una candidatura”.

“Me avisaron –relata– del PAN de Quintana Roo que me estaban buscando, y por supuesto que no hablé con ellos. Y el PRD también me ofreció todo tipo de candidaturas; para reina de la primavera, senadora, diputada, alcaldesa, de todo lo que se te ocurra. Siempre es lo mismo. Yo soy reportera. Y activista”.



20.2.12

LA POLÍTICA ALEGRE
Juan Carlos Domínguez

Oscar Vega, aspirante a la Gubernatura de B.C. 
LAS ANSIAS DE VEGA
Las ansias son canijas y más el que se las aguanta. Por eso Óscar Vega Marín, ex secretario de Educación en Baja California, y ahora flamante secretario ejecutivo de Seguridad Nacional, no desaprovecha oportunidad para dejarse ver y protagonizar lo que sea con tal de que su imagen vaya siendo familiar para reporteros y auditorios. Quiere ser gobernador de Baja California, y el actual mandatario José Guadalupe Osuna Millán ya le dio alas. La última de sus “triunfales” apariciones, fue el foro de alcaldes binacionales, donde supuestamente ofreció una conferencia magistral; y llegó a la diestra del gobernador tirando rostro. Su protagonismo, critican dentro del PAN, le ha llevado perder tacto y prudencia, al grado que en sus páginas de redes sociales tiene como fotografía de perfil una donde aparece en el homenaje póstumo a Francisco Blake. Y eso muchos no lo vieron nada bien. La urgencia del señor Vega por figurar llega al extremo de lo risible, pues aprovecha hasta el evento más bananero para hacerse presente. Por ejemplo, él mismo pidió ser invitado al informe de resultados de los regidores panistas en Tijuana. Pese a todo el escaparate y las fotografías, Vega es gris hasta en full color.

SUSTO
Mientras unos se regocijaban, otros sudaron la gota gorda en el encuentro de alcaldes fronterizos. Uno de ellos Julián Domínguez, vocero de la policía municipal de Tijuana. A la vez que los funcionarios mexicanos trataban de convencer a los gringos que nuestro país es seguro y confiable, un alcalde de la Unión Americana reportó que se le había perdido su agenda personal. Domínguez se estresó, ordenó a su subalterno “dile a tu gente que nos ayude a buscar”, y a punto de emprender un operativo especial (rumoran que hasta de los reporteros empezaba a sospechar), una asistente del funcionario norteamericano apareció con la feliz noticia –sobre todo para Domínguez– de que la agenda ella misma la había guardado.

BOCHORNO BINACIONAL
Para más bochornos en la calurosa y larga jornada del encuentro binacional en el World Trade Center de Tijuana, el sobrepeso también evidenció a varios. Se subían al elevador los alcaldes Carlos Bustamante, Enrique Pelayo, Francisco Pérez Tejada, Jerry Sanders y John Curt; así como asistentes y guaruras, cuando el aparato simplemente se negó a funcionar, se atoró. Pelayo, el presidente municipal ensenadense, luego, luego asumió la culpa y quiso bajarse del atormentado elevador. Mas por su investidura no se lo permitieron. Un guarura y dos secretarias compensaron el peso de Pelayo para que éste llegara a su destino en el tercer piso.

PA’ QUE APRENDAN
Un año y tres meses le llevó a la Dirección de Desarrollo Social del Municipio darse cuenta que a sus trabajadores no se les da el trato con el público ni la sensibilidad con los desvalidos. 15 empleados a los que les dieron chamba empezada la administración, y que se supone fueron colocados ahí por cumplir con un perfil de vocación social y gestoría, resulta que necesitan adiestrarse en esos menesteres para que aprendan a tratar a la gente. Lo bueno es que hay presupuesto para ello, 7 mil pesos costará el curso que les impartirá la UABC a cada uno de los promotores. Más de 100 mil pesos para que los empleados de Desarrollo Social tengan una sonrisa amable a la hora de entregar despensas, cobijas o vales de construcción.

16.2.12

Reunión Binacional de Alcaldes Fronterizos

PUROS BUENOS DESEOS


Juan Carlos Domínguez



A la vez de refrendar los problemas que atañen a sus ciudades y repetir las generalidades para la buena relación entre ambos países, la Segunda Reunión Binacional de Alcaldes Fronterizos sirvió para el escaparate y placeo de toda clase de gobernantes, funcionarios y aspirantes. Y eso es lo que más disfrutaron.

Fotos, muchas fotos, y declaraciones al por mayor, emitieron los presidentes municipales de Baja California, el gobernador, los senadores Manlio Fabio Beltrones y Fernando Castro Trenti; diputados como Gastón Luken Garza, funcionarios aspirantes a una posición mayor, como Óscar Vega Marín o Max García. En fin, todos dejándose querer. Hasta un Enrique Pelayo, alcalde de Ensenada famoso por beligerante, fue en esta jornada todo sonrisas y camaradería.

Se contó con la presencia, en muchos momentos meramente testimonial, de los presidentes municipales de Ciudad Juárez, Nogales, Agua Prieta y Cozumel por el lado mexicano; y por los Estados Unidos, estuvieron los alcaldes de San Diego, Calexico, Las Cruces y El Paso. Pero el lucimiento fue para los anfitriones: Francisco Pérez Tejada, Javier Urbalejo, Javier Aguirre (por cierto ausente) y, en especial, para Carlos Bustamante Anchondo.

Al presidente municipal de Tijuana no le ayudó mucho el discurso redactado por su equipo de comunicólogos. La misma perorata reivindicadora de siempre: “Quienes vivimos en la frontera sabemos que esta región es un espacio de retos y cambios, de oportunidades y desafíos, pero también de valores y principios compartidos”.

Un discurso pareciera ideado para que lo repita una concursante de belleza: “Nuestras naciones están orgullosas de su pasado, y por ello, la región fronteriza se ha convertido en el punto de encuentro y comprensión”.

En fin, palabras para no incomodar a los vecinos norteamericanos, pura música para los oídos: “Las puertas abiertas también abren corazones”. Qué bonito.

Quien llegó partiendo plaza y se retiró casi en hombros, fue el gobernador, José Guadalupe Osuna Millán. Vivaracho a más no poder, exclamó ante los invitados: “¡Bienvenidos al vibrante estado de Baja California!”.

Hizo derroche de estadísticas y, como buen economista, de números que sólo él puede interpretar con tal ficción. Puntualizando los cuatro estados norteamericanos y seis mexicanos que comprenden la franja binacional, soñó en grande: “Seríamos la cuarta potencia mundial en materia económica”.

Sutilmente le restregó a los vecinos güeros los 6 mil millones de dólares que los mexicanos gastan cada año en California: “Imagínense el tipo de relación que tenemos con Jerry Sanders (alcalde de San Diego)”. Ya no tan sutil, pero campechanamente, soltó: “¿Cuánto se gastan los norteamericanos acá? Muy poquito, no llegamos ni a los mil millones de dólares. Hay que buscar el equilibrio”.

Finalmente, terminó de promotor turístico, invitando a los alcaldes fronterizos de Norteamérica a disfrutar de la comida, vinos y paisajes de Baja California, “que cuenten cómo les fue en la feria”, que se desenfaden y gocen “para que nos recuerden con una sonrisa”.

A Óscar Vega, secretario ejecutivo de Seguridad Pública de la nación -a falta de Alejandro Poiré, que era el agendado-, lo anunciaron como el ponente de la conferencia magistral. Limitado, Vega repitió el discurso calderonista de la estrategia contra el narco, matizado para la complacencia de las autoridades norteamericanas. Afirmó que en nuestro país ya tenemos “la tranquilidad de una Policía al servicio de los mexicanos y no del crimen organizado”. Igual presumió los avances en materia de salud pública y educación. En medio del barullo, poca atención captó el también aspirante a la gubernatura de Baja California.

A media tarde, los munícipes binacionales celebraron mesas de trabajo con temáticas como Seguridad Pública, Cruces Fronterizos, Desarrollo Económico Fronterizo, Asuntos Migratorios; 30 minutos destinados a cada uno de estos importantes asuntos.

“No crean que fue una sesión de puro ‘rollo’”, aclaró uno de los ediles a la hora de reportar conclusiones, y éstas fueron la necesidad de agilizar los cruces fronterizos, crear zonas de desarrollo económico, de repatriación para los migrantes reportados, establecer reglas claras de estrategias de seguridad. Y como ejemplo, pusieron al alcalde Bustamante: “Viajar más a Washington para plantear nuestras problemáticas”.

Quien en definitiva se robó la tarde, literalmente, fue el senador Manlio Fabio Beltrones. Tratado y conduciéndose como una luminaria más del Canal de las Estrellas, carismático y coloquial empezó narrando su historia de vida. Platicó que le hubiera gustado ser presidente municipal, pero que nunca se lo permitieron, como no lo dejaron hacer otras cosas; luego dijo que intentando ser alcalde, logró ser diputado, gobernador, senador y, en fin, presumió todos sus cargos. “Pero a muchos sí logré hacer alcaldes”, se jactó con sonrisa Colgate. Planteó que los presidentes municipales son los más eficaces para diagnosticar y buscar la solución a las problemáticas regionales.

Luego hizo un paréntesis para, muy a su estilo, soltar una bofetada con guante blanco a los expositores que le antecedieron: “Yo había preparado un discurso, como siempre muy malo, por parte de mis asesores…”.

En el tema de la inseguridad, afirmó: “No he visto ciudad que no haya abatido su delincuencia; está Ciudad Juárez, Nogales, ya no digamos Tijuana”.

Sobre migración y la mano de obra mexicana, expuso: “En vez de levantar un gran muro, hagamos el muro del empleo, la mejor forma de convivencia”.

Entre los puntos que más interesaron por parte de Beltrones, destacó su opinión del Tratado de Libre Comercio: “Se quedó atrás, se firmó en el 93 para salir adelante en el 94”. Dijo que por ejemplo, para la crisis de 1995, dicho acuerdo ya no sirvió de nada. “Hay que ir a la segunda etapa, no a la simple revisión. El mundo ha cambiado, y mucho; y nuestra región más”, enfatizó.

Con su propia experiencia, puso de ejemplo la antigua relación México-Estados Unidos: “En Sonora, hace años, no había tantos problemas para cruzar al ‘otro lado’, podía visitar uno a los tíos, a los primos, sin mayor dificultad. ¡Y no estoy hablando de hace muchos años, sino los suficientes!”.

Abordó también la Iniciativa Mérida: “Temida e incomprendida, porque es incomprendida”. Lo más importante es que existe, precisó: “El problema no es el dinero, no, que por cierto, a veces no llega tan rápidamente”.

Ya en entrevista con reporteros tijuanenses, el también ex aspirante del PRI a la Presidencia de la República soltó las pedradas que tan bien le salen: “Pongamos los puntos sobre las ‘íes’, en México se necesita más crecimiento económico y empleo, más que el combate a la inseguridad. La inseguridad en sí misma se abatirá después que tengamos crecimiento económico y empleo para México”.



PEÑA NIETO:
LA ACTUACIÓN EN EL BORDO


Generalidades, lugares comunes, retórica pura en las declaraciones del candidato del PRI, en conferencia de “terrenazo”, después de la grabación de propaganda para televisión. Habló con los reporteros de migración, inseguridad y Zona Económica Estratégica. No supo definir políticas, ni dijo cómo cambiar la situación.



Juan Carlos Domínguez Beltrán


Después de encuentros privados con priistas de la entidad, y tras pernoctar en el hotel Camino Real, Enrique Peña Nieto, candidato del PRI a la Presidencia de México, aprovechó sus últimos minutos en la ciudad para echarse una vueltecita al “bordo”, el Cañón Zapata de la colonia Libertad.

La razón de tan inusitada visita -algunos perversos comentaban, “mejor lo hubieran llevado a Lomas Taurinas”- fue la grabación de un spot televisivo, a cargo de una productora capitalina bajo el mando de Pedro Torres.

“Obviamente no viene a filmar un video turístico, ¿no?”, ironizó un miembro de su equipo de prensa. Se realizó un anuncio propagandístico para integrarlo a la campaña política que arrancará -formalmente- en marzo. En las imágenes se verá a un Peña Nieto pisando el suelo terregoso y contemplando la malla de acero que nos separa de Estados Unidos, mientras se solidariza con el pesar de los indocumentados y les promete solucionarles la vida.

Eso sí, para no interrumpir las buenas tomas, al candidato lo rodeó una veintena de policías vestidos de civil; guaruras mostrencos de factura mexiquense, y un staff de producción, todos ellos encargados de cercarlo varios metros a la redonda, empujando y desalojando a reporteros, fotógrafos, uno que otro fan y reporteras fans. De hecho en el siguiente recorrido, el secretario de Seguridad de Tijuana, Alberto Capella Ibarra, también la hizo de elemento de seguridad del precandidato.

En la rueda de prensa de banqueta -o “terrenazo”-, el candidato consentido de las televisoras, y los reporteros con él, aprovecharon el escenario para ponerse a tono con preguntas y respuestas acordes con el tema. Peña Nieto hizo derroche de lugares comunes para beneplácito de las grabadoras y las cámaras.

“El tema migratorio es uno de los que habremos de abordar, veo una gran oportunidad para que realmente se construya un acuerdo que siempre se ha venido trabajando y que hasta ahora no se ha cristalizado, ni materializado en algún punto”, dijo con razón.

Refirió que los gobiernos de ambos países deben establecer mecanismos de seguridad más eficaces, pero respetando la soberanía, para detener el tráfico de armas y lavado de dinero.

Cuestionado sobre una Zona Económica Estratégica sobre la que pugna el empresariado de Baja California, afirmó que precisamente ése es uno de los intereses prioritarios de su proselitismo, el escuchar, atender y comprometerse con las necesidades especificas que tiene cada entidad del País. Comprensivo, consideró: “No puede ser que productos que aquí se producen, tengan un costo más elevado al que tienen del ‘otro lado’”.

Una reportera de Telemundo, canal dirigido al público hispano en Estados Unidos le soltó una pregunta de rigor para su auditorio, si haría proselitismo en el vecino país. Peña Nieto titubeó con algo que no había considerado: “No lo he definido todavía… Vamos a ver”. Y recurrió a la elocuencia instantánea: “Evidentemente en la posibilidad del derecho político que hay para que los mexicanos que están del otro lado puedan ejercer su derecho a votar, pues probablemente esté en la agenda…”.

Generalidades y más generalidades las de Peña Nieto. Como cuando le preguntaron si tiene alguna propuesta para los migrantes: “Está claro que hay que tener política para darle atención a los migrantes que lamentablemente no han encontrado una oportunidad en Estados Unidos, son deportados a México y las muchas ocasiones terminan por quedarse en algún punto de la frontera, y hay que generar oportunidades para los mexicanos, hay que propiciar, hay que detonar crecimiento económico para generar empleos…”, y así le siguió, pero sin decir cómo.

Respecto a seguridad pública, expresó que la inseguridad es el tema más sensible para todos los mexicanos; que los tres delitos que más lastiman a las familias mexicanas y la convivencia social, son el homicidio, la extorsión y el secuestro. “Hay que combatirlos”, sentenció.

“Lo que buscamos es mayor eficacia, y sobre todo un combate eficaz a la violencia extendida a varias entidades del país. Tenemos que hacerle frente común los tres niveles de gobierno, de manera más coordinada”, disertó.

— Se piensa: Si regresa el PRI, se pacta con el narco…, intervino éste reportero.

“Pues a veces eso está más en el ánimo del partido en el gobierno, y específicamente en el gobierno. Despiertan sospecha a partir de los señalamientos en materia de procuración de justicia. Pareciera que hay un ánimo por desprestigiar al partido, especialmente fuera de nuestras fronteras. En Estados Unidos hemos conocido señalamientos de distintos funcionarios que hacen sobre este hecho que Usted bien señala”, respondió.

“El PRI ha dejado claramente su posición, y en lo personal lo he hecho. Es tarea del Estado mexicano combatir al crimen organizado, no es tarea exclusiva de un partido político. Que no se genere confusión en esto, que no se quiera distorsionar lo que es una obligación irrenunciable del Estado mexicano”.

Y bien, “… parece que el partido en el gobierno, y el propio gobierno, en este tema se ocupa más de hacer campañas de desprestigio para el PRI. No se confundan, el PRI está comprometido para generar condiciones de seguridad para todos los mexicanos, y para combatir de manera eficaz al crimen organizado”.

— ¿Cuál sería una nueva estrategia contra el crimen organizado?

“Hay que tomar de lo que se ha hecho. El trabajo realizado en varios frentes servirá sin duda para fortalecer aún más la estrategia que sigue en este combate eficaz. Creo que no vamos a partir de cero de lograr la aspiración (de ser Presidente, se refiere).

“Creo que se han construido cimientos importantes, hoy tenemos una Policía Federal de mayor tamaño, que debe servir al Estado mexicano, y ésta debe permitirnos en las estrategias que definamos hacia adelante, de alcanzar la aspiración; evidentemente de lograr eficacia, disminuir sensiblemente la violencia, los homicidios, la extorsión y el secuestro”.

Por último, el priista se dijo animado y motivado con las preferencias que en todo momento lo han ubicado en primer lugar en las diferentes encuestas de referencia.

Manifestó que ellas reflejan la necesidad que tiene la sociedad de encontrar una nueva alternancia, un cambio, y la confianza que para ello depositan en él y su partido: “El compromiso de lograr mi aspiración, es lograr que el País cambie, que retome el rumbo, nuevamente de crecimiento, de oportunidades para todos los mexicanos. Ése es el compromiso que quiero hacer, encontrar un cambio, una nueva alternancia. Y el PRI, de forma responsable quiere estar en esa opción”.

Total, en el bordo tijuanense, Enrique Peña Nieto armó su espectáculo en el ambiente que más le gusta. Frente a las cámaras de televisión.



15.2.12

NADIE QUIERE DEFINIR LOS LÍMITES

Aunque ya decretados los límites territoriales que separan a Rosarito de Ensenada, los pobladores de Santa Anita siguen en la duda de a cuál gobierno municipal pertenecen. La vida la hacen entre dos ciudades, contribuyen con pago de impuestos y servicios para ambos ayuntamientos, pero ni una ni otra autoridad les atiende en sus necesidades básicas. El gobierno estatal no tiene ninguna presencia, y el Congreso del Estado lleva años sin ratificar lo que ya está decretado. Ninguna autoridad se interesa en resolver la controversia, los alcaldes de los dos municipios están echados en la chorcha y los diputados de la actual legislatura especulan con el tema para sus intereses políticos.


Juan Carlos Domínguez

No son de aquí… ni son de allá. Así hacen sentir a los pobladores de la Santa Anita, una colonia ubicada en el municipio de Rosarito… ¿o Ensenada? Ni ellos lo saben. Gracias a la ineptitud y flojera de ambos alcaldes y los diputados del Congreso del Estado, son colonos de la tierra de nadie.

Desde hace más de 16 años, los habitantes de ese territorio donde colindan Ensenada y Rosarito, llevan una vida cotidiana repartida entre las dos ciudades, según convenga a sus necesidades y capacidad de transporte. Oficialmente pertenecen a la delegación Primo Tapia de Rosarito, pero están aledaños a la delegación La Misión de Ensenada, mismas que los atienden cuando les conviene, y cuando no, ni en el mundo los hacen.

En la Santa Anita se vive en carne propia los problemas que derivan de la indefinición para establecer los límites que dividen a ambas ciudades, los cuales la costumbre y el dictamen que en su momento emitió el Congreso local, los fijan en el Kilómetro 61, a la altura del restaurant La Fonda, mas en la práctica y en términos administrativos, los gobiernos municipales hacen caso omiso. Principalmente Ensenada, para sangrar a los rosaritenses.

Las autoridades de Rosarito poco han hecho para exigir el respeto a su jurisprudencia.

“Es un show… es un desmadre”, ilustra un ama de casa de la colonia Santa Anita respecto a los problemas que viven día a día por radicar en una zona que une a dos ciudades y donde no está claro “para dónde ‘jalar’”.

La gente no sabe a qué municipio pertenecen. “Mi credencial dice que soy de Ensenada”, explica Brenda Pinto, residente de la colonia, “pero los trámites los tengo que hacer en Rosarito”. De hecho por economía, la gente prefiere acudir al sexto municipio porque les resulta menos caro el transporte, pero las más de las veces no pueden concluir algún trámite burocrático porque simplemente no los consideran rosaritenses: “Me dicen ‘no te puedo otorgar el apoyo, al menos que saques un carta de residencia’”.

Todo trámite es un viacrucis. Refieren los colonos cómo los servicios de agua, luz, predial, gas, teléfono, unos tienen que pagarlos en Ensenada y otros en Rosarito. Por ejemplo, el Impuesto Predial, que algunos ciudadanos tienen que pagar al gobierno de Ensenada, otros al gobierno rosaritense, y el colmo: se ha dado el caso de familias que han tenido que pagar doble Predial porque ambos ayuntamientos se lo exigieron.

Para obligarlos a pagar impuestos, servicios y derechos, ambos gobiernos municipales sí están bien puestos, pero para auxiliar a los ciudadanos en otro tipo de requerimientos o auxilios, se avientan la bolita. Cuenta una señora que cuando acuden a solicitar atención médica al Centro de Salud en la delegación La Misión (Ensenada) se los niegan y les dicen que se vayan a Rosarito, también la Cruz Roja, de uno y otro lado, se han negado a recoger heridos bajo el mismo argumento.

Los delegados, Adolfo Ariel Sánchez, de La Misión, e Ignacio Peña, de Primo Tapia, nomás se paran el cuello en declaraciones públicas, pero a los pobladores de la zona les brindan servicios a medias. Eso sí, son muy atentos con la “Colonia de los Americanos”, como coloquialmente le llaman a la zona alta de Santa Anita, donde se asientan norteamericanos habitando grandes casas. Ellos gozan de privilegios que no se les brinda a la prole, como la seguridad pública: “¡N’ombre! si hasta parece que tienen seguridad privada”.

La particular condición de Santa Anita y demás áreas que comparten los 9 kilómetros que comprenden los linderos de la frontera Ensenada-Rosarito, han originado rezago, marginación y pobreza, cuando nadie asume responsabilidad sobre ellos.

Desde los primeros días de enero, hubo una situación que puso de nuevo en alerta los conflictos que se originan por no establecer contundentemente la delimitación territorial de la zona.

El 9 de enero, la Dirección de Desarrollo Urbano de Playas de Rosarito mandó construir una caseta de seguridad en pleno centro de la colonia Santa Anita. Así lo habían solicitado los colonos desde mucho tiempo atrás, debido a la inseguridad que padecen, con robos, asaltantes y narcomenudeo. Cuando empezó la construcción, Isidro Escobar, presidente de la asociación civil Movimiento Ciudadano para un Poblado en Desarrollo, pensó: “Esto ya no me gusta, porque va a originar una serie de enfrentamientos”.

Y en efecto, a los tres días la Dirección de Catastro y Control Urbano del Ayuntamiento de Ensenada mandó poner sellos de suspensión de obra por no contar con los permisos ni anuncios requeridos, ya que según la clave catastral, el predio donde se pretendía instalar la caseta corresponde a Ensenada.

Finalmente, las autoridades municipales de ambos gobiernos conciliaron. Se reunieron los síndicos procuradores y secretarios de gobierno de ambos Ayuntamiento, se pusieron de acuerdo y determinaron cancelar definitivamente la construcción de la caseta de seguridad. El gobierno ensenadense dijo que se desistiría de cualquier tipo de denuncia penal en contra de funcionarios, y el gobierno rosaritense simplemente respondió “ahí la dejamos”. ¿Y los ciudadanos?, bien, gracias; seguirían padeciendo el vandalismo, como muchos otros problemas, por el hecho de no ser de ni aquí ni de allá.

La juegan mucho

Los límites territoriales de Rosarito con Ensenada quedaron bien definidos desde 1995, cuando por el Decreto 166, se creó el Municipio de Playas de Rosarito. De hecho la delimitación también estaba definida de acuerdo a la Ley Orgánica de la Administración Pública Municipal del Estado de Baja California, según se publicó en el Diario Oficial. Más aún, en el Decreto 146, publicado en 1998, nuevamente se establece el límite sur de Playas de Rosarito; en 2001 se vuelven a ratificar los límites en la Ley del Régimen Municipal para el Estado de Baja California y, ¡otra vez!, el 22 de febrero de 2002, en el Periódico Oficial del Estado, se establece la extensión y límites territoriales en la Ley Orgánica de la Administración Pública Municipal del Estado de Baja California.

Ensenada nunca ha respetado los límites y se ha aprovechado cobrando Impuesto Predial, Impuesto sobre la Adquisición de Bienes Inmuebles, derechos por permisos de Alcoholes, derechos por concepto de ocupación de Zona Federal Marítimo Terrestre, permisos de comercio, licencias de construcción, usos de suelo, licencias de anuncios, entre otros servicios.

De ahí la inquietud, una vez más, de que se ratifiquen los límites territoriales de Rosarito de, por ejemplo, el grupo Rosarito es Primero, A.C., presidida por el ex regidor José Ciprés, para que el Congreso del Estado ratifique la delimitación y exhorte al Ayuntamiento de Ensenada a ya no incurrir en invasiones y cobros ilegales.

La petición a la actual Legislatura ya se le hizo llegar también por parte del Cabildo de Playas de Rosarito, pese a la indiferencia que en cuanto al tema ha mostrado el alcalde Javier Robles Aguirre, “más preocupado por pasear a sus novias en La Paz y Los Cabos”, denuncia un ex funcionario.

Con los diputados de la actual Legislatura, el tema ha resurgido, pero con la idea de someter nuevamente a análisis los límites territoriales y emitir una nueva Ley. Es decir, empezar de cero, cosa que no es vista con buenos ojos: “No queremos meternos en esa disyuntiva, yo ya me llamo Rosarito y ya tengo mis límites, no le busquen más”, expresa José Ciprés, ex regidor por el Partido Estatal de Baja California (PEBC).

Las diputadas Rosana Soto, legisladora por ese distrito, el 16 local, y Nancy Sánchez, hasta hace unos días presidenta de la Comisión de Fortalecimiento Municipal, hablan de una iniciativa para delimitar Playas de Rosarito cuando, insisten los inconformes, no es necesaria. Incluso se presta a suspicacias.

El temor y la sospecha es que el tema se quiere manejar políticamente. Ya en la legislación pasada, el diputado Alfredo Ferreiro (PES) presentó el proyecto para la creación del estatuto territorial, y le congelaron la propuesta. Lo mismo quieren hacer ahora, guardar el tema hasta que sea propicio a los intereses de algunos políticos. “Al tema se le debe dar una solución política”, ha respondido ambiguamente el actual secretario de Gobierno del Ayuntamiento de Rosarito, Catalino Zavala, según platican los de Rosarito es Primero.

Zavala conoce bien el tema, porque aparte lo vio como diputado que fue en la Legislatura pasada: “Pero le dieron dinero, le dijo el gobernador ‘¡no!, porque Pablo Alejo (entonces alcalde panista de Ensenada) no quiere’. Catalino se hizo pen…”, refiere un ex funcionario.

A sabiendas que Zavala anda tras la postulación para ser diputado local por quinta ocasión, ahora por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), los rosaritenses involucrados afirman que el actual secretario de Gobierno quiere administrar el tema para llevar agua a su molino.

Amén que temen que en el Congreso local ignore los decretos anteriores, e intenten favorecer ahora al gobierno de Ensenada: “Mira, tú si eres diputado y eres de la bancada del PRI, ¿con quién te vas a ir, con el camarada grandote o el chiquito?”, sugiere Ciprés, en la idea que como Ensenada resulta más atractivo, electoralmente hablando, por el número de votantes. “El Congreso estaría violentando la propia Constitución estatal si se van con ese tipo de resolución. Sería darle un revés a lo que por 16 años ha estado avalando cada Congreso; qué pasaría con todos esos cobros ilegales que Rosarito hizo en su momento, si se considera que no le correspondían”.

Una nueva resolución como la que pretenden el presidente municipal de Rosarito, el secretario de Gobierno y las diputadas locales, la consideran absurda: “No se puede resolver políticamente lo que ya se resolvió jurídicamente”.

De todos no se hace uno

En una cosa coinciden organizaciones civiles y ciudadanos de a pie respecto al problema de los limites de Rosarito. De los alcaldes de ese municipio y Ensenada ya no se puede esperar nada: “Enrique Pelayo por loco y beligerante, y Javier Robles por irresponsable y padrote”.

Por encima de ellos está otro que no canta mal las rancheras: El gobernador del estado, José Guadalupe Osuna Millán. Pero peor, ni los ve ni los oye. Hay una desatención total de la administración estatal para toda el área de Santa Anita y los límites Rosarito-Ensenada.

“Tenemos que involucrar al gobernador, él no es ajeno a este problema porque lo conoció en la administración pasada, inclusive SIDUE (Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano del Estado) tiene un dictamen favorable a Rosarito, él sabe los limites de Rosarito”, revela el ex regidor José Ciprés.

Lo mismo imploran las organizaciones civiles Dulce Atardecer y Movimiento Ciudadano por un Poblado en Desarrollo: “Que el gobierno del estado asuma la seguridad de la zona para evitar enfrentamientos entre fuerzas policiacas de los municipios de Ensenada y Rosarito”.

También: “Exigimos madurez política a los alcaldes de Ensenada y Rosarito, las declaraciones de los distintos actores en torno al tema de límites territoriales deben traducirse en acciones encaminadas a resolver problemas que azotan a la zona, no en enfrentamientos. La zona es la afectada”.

Un ejemplo de la gravedad de casos que se pueden detonar por el problema de la indefinición de los límites territoriales, fue el suscitado hace seis meses, cuando en esas zonas limítrofes hubo un enfrentamiento entre policías de Ensenada y guaruras del alcalde de Rosarito. Relatan los testigos que elementos policíacos del puerto encañonaron a los escoltas de Javier Aguirre a la altura de La Fonda, ubicada a tres kilómetros de donde empieza Ensenada, hasta donde penetraron los agentes ensenadenses. “El simple hecho que policías municipales de Ensenada invaden territorio de Rosarito, puede llegar el momento en que pierdan la licencia colectiva de armas, porque es invasión de territorio”, considera Ciprés.

Pero ése es problema de todos los días, el que policías ensenadenses se introduzcan a la costa de Rosarito a asaltar y extorsionar a paseantes. Uno de tantos problemas que origina no delimitar la frontera Rosarito-Ensenada, sobre todo el del rezago social de una población calculada en 4 mil habitantes, con desempleo (los habitantes viven básicamente de la siembra, la construcción y como meseros), pago doble de impuestos, incertidumbre sobre la tenencia de la tierra, falta de inversión para incentivar al turismo y un largo etcétera.

Eso sí, ambos gobiernos municipales se pavonean de lo mínimo que llegan a hacer por los pobladores en esa zona. En la colonia Santa Anita se puede ver una cancha deportiva donde la obra se la adjudica el Ayuntamiento de Rosarito, mientras que a una cuadra se ve una escuela con los logos del Ayuntamiento de Ensenada.

Se da el caso que a diferencia de las agrupaciones civiles politizadas en Rosarito, a los habitantes de la Santa Anita no les importa quedarse como rosaritenses o como ensenadenses; lo que quieren es que el Congreso del estado, última instancia y última esperanza para su desasosiego, fije una postura firme y contundente respecto a los límites territoriales: “Sumaremos esfuerzos para seguir trabajando a favor de la comunidad con el Ayuntamiento que sea favorecido, ¡pero que defina ya!”.



14.2.12

MÁS PROBLEMAS EN EL COLEF


Académicos a la orilla del mar y los libros enbodegados.
Ahora varias decenas de ex empleados, contratados en su momento para operar la Cédula de Identidad para Menores, tienen demandada a la institución por no respetar sus prestaciones de Ley e incluso “jinetear” sus sueldos. Además, se vive un clima tenso por la próxima elección de nuevo presidente.


Juan Carlos Domínguez

Paradójicas resultan las cosas en El Colegio de la Frontera Norte (COLEF). Mientras su presidente, Tonatiuh Guillén, reingresó a cuatro investigadores que habían presentado su renuncia definitiva y que ahora regresan con respeto a su antigüedad de hasta 25 años, alrededor de 200 ex empleados tienen presentada una demanda penal contra ese organismo, precisamente por no respetarles prestaciones como aguinaldos, vacaciones y prima de antigüedad.

Al actual clima de tensión que vive la institución académica, debido a la próxima elección en la que pretende reelegirse Guillén, se suman los litigios penales que enfrenta el COLEF. Uno de ellos el del doctor Jorge Santibáñez, ex presidente de esa institución y que hace unas semanas fuera inhabilitado y denunciado ante el Ministerio Público Federal por mal uso de recursos. Alega injusticia y revanchismo personal.

El otro pleito contra el COLEF no es para menos. Se trata de una demanda laboral interpuesta por entre 180 y 200 empleados que fueron contratados temporalmente para la operación de la Cédula de Identidad para Menores, y que una vez que ya no los ocuparon, fueron despedidos, pero sin la retribución de sus prestaciones de Ley, según denuncian.

Ya lo decía en entrevista con ZETA el doctor Jorge Santibáñez, lo inadecuado que resultaba que una institución académica como ésa se prestara a operar programas gubernamentales, sin ninguna ventaja para el Colegio, ya que ni siquiera iban a poder participar en la documentación o trabajos de investigación con tal información, lo que es la vocación del COLEF.

En enero de 2011, cerca de 700 técnicos externos al Colegio fueron contratados y posteriormente capacitados para atender en módulos fijos e itinerantes en escuelas y oficinas gubernamentales donde se llevó a cabo el registro de menores de edad.
El presidente del COLEF declaró a la prensa que la institución captaría recursos por el cobro que haría del manejo operativo y especializado del equipo asignado. Incluso afirmó y presumió que la institución también se beneficiaría de la información recabada para efectos de los trabajos de investigación poblacional que llevan a cabo, cosa esta última que era totalmente falsa.

El entreguismo para con el gobierno panista de que han acusado a la actual administración del COLEF, ahora cobra factura en un conflicto que no tendría necesidad de enfrentar: la de un pleito laboral.

Un grupo de empleados afectados, “porque lo éramos”, aclaran que fueron contratados de forma temporal para operar la Cédula de Identidad para Menores. Literalmente denuncian:

“Somos un grupo de más de 200 personas que demandamos al COLEF por no pagarnos prestaciones, como aguinaldo, prima de antigüedad y, sobre todo, ‘jinetearnos’ el dinero”.

Afirman que varias veces les retuvieron sus sueldos indebidamente, “tanto dinero que maneja el COLEF y no cumple con sus empleados”, externan indignados.

Consultado por ZETA, el abogado que lleva el caso a los ex trabajadores Mariano Cárdenas Castro, expresó después de denotar su sorpresa ante la solicitud de datos: “Oiga, ahora sí me agarró con los calzones en las rodillas”. Aclaró que la demanda laboral sigue en trámite y que se siguen acumulando otras demandas.

“Todavía no se resuelve nada, hay ciertas circunstancias que no han permitido que el asunto avance”, expuso.

Como siguen llegando más demandas denunciando la misma situación, deben esperarse a que se acumulen todos los juicios. Argumentó que fuera de eso no hay mayor problema para solucionar el juicio a favor de los demandantes, “es una cosa muy simple”.

Ratificó lo declarado a ZETA por los ofendidos, en el sentido que acusan que no se les pagó aguinaldo y tampoco les dieron lo proporcional a sus vacaciones correspondiente al último año de trabajo. También informa que las personas fueron contratadas para elaborar encuestas y la operación de la cédula para menores, “y de buenas a primeras les dijeron que ya no pertenecían al COLEF”.

Respecto a la perspectiva de que el caso sea ganado por los empleados, Cárdenas Castro se muestra optimista: “Puede estar seguro que vamos a tener éxito”.

Mientras que por parte del COLEF se negaron a declarar a este Semanario respecto al litigio, el abogado Ricardo Jasso Villazul, asesor jurídico de la institución, mandó decir con voceros del Colegio: “Los casos están en Conciliación y Arbitraje”.



12.2.12

LA POLÍTICA ALEGRE
Juan Carlos Domínguez

Aspirantes del PAN a la diputación del distrito 8
ILUSIONADAS
Los panistas no solamente se han apropiado del método del “dedazo” priista, sino que presentan su versión corregida y aumentada. Cada vez lo vuelven más sofisticado y lo llaman “designación”, para regocijo de los ungidos y sueño guajiro de los que quieren pero no les toca. Todo antes que matar la ilusión. Ahora para cumplir con la mentada “cuota de género”, y dado que no quieren soltar los otros distritos repartidos en Baja California, mandaron a las féminas a que se agarren de la greña por el Distrito 8, correspondiente a Rosarito y colonias de Tijuana como Camino Verde y la Sánchez Taboada. Les dijeron a las mujeres del PAN que se apuntaran, y en Comité Nacional ´se encargarían de elegir a la mejor; de elegir, ¿eh?, no imponer. Ahí van, un total de diez damitas entusiasmadas en la vocación “democrática” de su partido. Y piden que las llamen ilusionadas, no ilusas.

LA MALQUERIDA
“Sí, sí la siguen queriendo”, responden una panista cuando uno, escéptico, duda que la candidatura de la diputación por el distrito ya está reservada para Ruth Hernández, con eso de que la han tratado tan mal últimamente y que no la quiere ni el gobernador, ni los dirigentes estatal y municipal del PAN. Pero dicen que precisamente por eso, ahora la consolarán por los perjuicios del pasado en contra de la ex oficial mayor del estado.

LA ESPERANZA MUERE AL ÚLTIMO
Pero por si no quieren hacer tan evidente el dedazo para Ruth, la pelea la darán, afirman en el PAN, Rosalba López Regalado, Leticia Castañeda o Delia Guillermina Ávila. La primera es actual funcionaria de Educación en el estado, fue regidora en el gobierno municipal de Jorge Hank y buscó una diputación local cuando el “dedazo azul” favoreció a Ricardo Magaña. Su pecado es no tener “grupo” dentro del partido. Participativa como pocas, también la acusan de que siempre se apunta para buscar una diputación, que “la juega” bien un rato y luego se hace un lado para que la favorezcan con un cargo público. Y ¡vaya!, no le han faltado. Ávila, panista desde hace 20 años, es bien ubicada por ciertos sectores sociales porque ha trabajado en Desarrollo Social y en asociaciones civiles, formó parte del gabinete del ex alcalde de Rosarito de Macías. Y la otra, Leticia Castañeda, es ubicada como una de las tantas “huérfanas” de Francisco Blake; hará su luchita pese al desamparo y la mala fama al interior del partido, pues refieren en el equipo de campaña del ex candidato Carlos Torres que ésta, que fue subsecretaria de Desarrollo Social, tuvo malos manejos de recursos.

DESPRECIADAS
Ya ubicadas nomás para hacer “bola”, están las suspirantes Alma Rosa Sainz, quien ha vivido del presupuesto oficial panista desde hace varios años, siempre al amparo del grupo de Javier Castañeda. Las malas lenguas en el PAN recuerdan que en su último cargo, como directora del sistema educativo municipal, hubo muchos problemas con el pago puntual a los maestros, se les retrasaba hasta cuatro meses, y a los quejosos Sainz les gritaba y los corría de su oficina. Y de Vanessa Romero, dicen que tiene tan baja estima, que lo más a lo que aspira es a ser suplente de Ruth Hernández. También están en la “polla” Gabriela Peregrina, Rosa María Oviedo y Ana Luisa Hernández Escudero; pero despectivos los panistas entre ellos mismos, declararon a CUENTAHILOZ: “De ésas ni vale la pena hablar”.

ENCUESTADORA CESPT
O en la CESPT están muy calientes con la “fiebre” de las encuestas, o de plano le andan midiendo el agua a los camotes -por órdenes de arriba- para medir la popularidad de Ernesto Cordero (sabido es que los mandatarios estatales operan a su favor), el caso es que empleados de diferentes niveles de esa paraestatal, andan realizando sondeos en diferentes colonias de Tijuana y Tecate, sobre todo las más populosas, para conocer qué simpatías arrastran los precandidatos a la Presidencia de la República. Una empleada molesta por el incremento de chamba en asuntos que no tienen que ver precisamente con el suministro de agua, se quejó con este columnista después de asolearse en el Nido de las Águilas aplicando el cuestionario que le ordenaron en la dependencia que encabeza Hernaldo Durán. La “Encuestadora CESPT” seguirá su chamba este fin de semana en las colonias El Florido y El Niño.



30.1.12

LA POLÍTICA ALEGRE
Juan Carlos Domínguez

Capella, Jefe de la Policía en Tijuana.
DE RAMBO A RAPERO
Cuando uno piensa que ya lo ha visto todo en este país, siempre aparece algo nuevo que sorprende, y avergüenza. De esas cosas que dan pena ajena. En el circo, maroma y teatro montado por Televisa, experto en esas cosas y que ahora llamó “Espacio Vanguardia”, Alberto Capella, hizo gala -¡otra vez!- de su protagonismo. En una mezcla de rapero de barrio y Adal Ramones, el secretario de Seguridad Pública rapeó los 5 puntos de “El Otro Rollo” de esa dependencia, que no es otra cosa que la advertencia para borrachos, drogos, malandros y guevones (así lo dijo) de que la corporación que encabeza “te va agarrar” o “los vamos a correr de Tijuana”, con un guion redactado seguramente por su staff de “brillantes” comunicólogos. Está bien que el lamentable monólogo es muestra del nivel de nuestros funcionarios y de un Capella que es capaz de inventarse historias hollywoodenses, pero para qué andarlo presumiendo, hasta en YouTube.

BOBOS
“No tiene la culpa el indio, sino el que lo hace compadre”, reza sabiamente un refrán y para el espectáculo de payasos, animales, fenómenos y comparsas llamado “Espacio Vanguardia” aplica perfecto. Decenas de jóvenes que se dicen universitarios pensantes, aplaudieron, rieron y ovacionaron, no solamente a Capella, sino a un “mesías” de la mercadotecnia como Marco Antonio Regil, funcionarios panistas, malos conductores, y a escritores y músicos locales como los integrantes de Nortec, Pepe Mogt y Juan Carlos Reyna, que cantinflearon de lo lindo intentando descubrir el hilo negro de la inseguridad en México, y en una larga perorata indescifrable condenaron a los grandes cárteles y, monopolios, así como a los principales empresarios de México, precisamente cuando ellos mismos estaban ahí sentados muy satisfechos contribuyendo a la tradición embrutecedora de Televisa. No hombre, si para “congruentes” no hay quién nos gane.

SUFRIR ME TOCÓ A MÍ…
Fea fue la traición, y peor la decepción, para David Saúl Guakil, titular de la Secretaría Desarrollo Social Municipal, que lleva una semana totalmente desaparecido, no contesta llamadas, radio ni celular, hundido en el desconsuelo y la lágrima, escondido para que nadie sepa su sufrir. Le puso muchos kilos y dinero a su campaña para lograr la candidatura a Senador por el PRI, pero la “democracia” de su partido le hizo una chicanada. Primero la traición de sus propios empleados en el Ayuntamiento, unos pidiendo firmas de apoyo para María Elvia Amaya de Hank, y otros para Eligio Valencia Roque. Después los designios partidistas lo hicieron a un lado para favorecer a la esposa de Jorge Hank, y todo para que al final aquella “declinara” y nomás le hiciera mal obra al también comerciante de ropa. Lo que más le duele a Guakil, clasista como él solo, es el duro golpe a su pundonor y orgullo judío que no pudo contra los amarres del líder charro purechepa.

NO ESTABA MUERTO
Lo que no se logró en 6 años, tener alguna noticia del Senador panista por Baja California, Jaime Díaz Ochoa, fue posible tras el comentario medio en broma y medio en serio que Cuentahiloz vertió aquí la semana pasada. Dio señales de vida, ahora que ya se va. En una carta dirigida a este columnista (ver sección Cartaz) enumera una treintena de temas que ha promovido, solicitado, propuesto y exhortado, dice, en favor de los bajacalifornianos. Lo escrito en este espacio, acusa, “pone de manifiesto su absoluto desconocimiento acerca del trabajo legislativo y la actividades que he tenido como Senador dela República desde Agosto de 2006 a la fecha”. Darlo por muerto entonces, es culpa de los medios y los reporteros de la región, aunque a éstos en más de un lustro no les haya llegado ni un méndigo boletín de las arduas labores legislativas de las que hasta hoy nos llegamos a enterar.

26.1.12

ERNESTO CORDERO:

“SIEMPRE ME LA HE CREÍDO"


El debate entre sus contrincantes de partido le levantó el ánimo. Siente que conquistó a la militancia panista en base a la congruencia que él sí tiene y Josefina Vázquez Mota no. Le niega importancia a las encuestas que favorecen a la ex coordinadora de diputados del PAN: “Que se acuerde lo que le pasó a Santiago Creel en 2006”. Se mantiene firme en avalar la administración de Felipe Calderón y dejar claro que la suya, será una continuidad del sexenio, pero en una segunda etapa, donde “se avance más rápido”.




Juan Carlos Domínguez
Isaí Lara

A diferencia de Josefina Vázquez Mota, en el equipo de campaña de Ernesto Cordero no se observa tanto jolgorio. Se nota más solemnidad, por lo menos durante su visita a Tijuana.

Dejándose acompañar apenas por un puñado de panistas incondicionales, donde destaca Luisa María Calderón “Cocoa”, hermana del Presidente del país y candidata derrotada para la gubernatura de Michoacán. Aparte de ella, en la “avanzada” por Baja California lo siguieron la diputada federal Gabriela Cuevas, el legislador por Baja California Rubén Alanís y Tulio Cardona Benavides, aspirante suplente a una diputación.

Resguardado por algunos elementos del Estado Mayor Presidencial y auxiliado por colaboradores del área de comunicación del gobernador de Baja California, el ex secretario de Hacienda llega más envalentonado, más “suelto” en relación a lo que han sido todos sus meses de proselitismo. Saca fuerzas de su flaqueza y dice sentirse muy satisfecho y contento, tras haber sostenido -tres días atrás- el debate con sus contrincantes Josefina Vázquez Mota y Santiago Creel. Asegura que logró lo que más le interesaba: marcar la diferencia entre él y los otros dos.

Considera que tras la confrontación, la militancia panista se dio cuenta qué tiene y qué le falta a Vázquez Mota y a Creel: “La congruencia; yo siempre he hablado con la verdad. Y la otra es la trayectoria en la conducción económica del país”.

Reitera los reproches que le lanzara a Vázquez Mota, a quien acusa de que hasta ahora se ha subido al barco de Calderón, más por oportunismo que por convicción. Que ha mentido según le convenga. Él, por su parte, presume en cada momento su lealtad a Felipe Calderón, y reparte culpas a sus contrincantes de partido.

“Un valor en la política es tomar definiciones y hablar con la verdad, tratar de convencer al mayor número de personas de la sociedad civil de que está haciendo lo correcto, y saber escuchar. Ésa es mi manera de hacer política”; expresa.

“Lo que no se vale es tratar de complacer a todos, de decir una cosa en un auditorio y decir otra en otro, porque al final de cuentas todo eso sale a la luz pública y todo se sabe. En el PAN nos gusta la congruencia y tomar decisiones muy definidas”, afirma.

Hablando de congruencia, Cordero se mantiene firme en avalar la administración del Presidente Felipe Calderón y en anunciar que prácticamente, de llegar a esa posición, su gobierno será una réplica. Por supuesto que ve con exagerado optimismo la política económica en la que él ha sido partícipe. Se supone experto en la materia, pero se le cuestiona entonces por qué los pobres en México, de 2010 al presente año, aumentaron de 48.8 millones a 52 millones, según estudios del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.

“Yo creo que hay que hacer una revisión más integral de los indicadores de pobreza, y ahí lo remito al último reporte del CONEVAL, donde establece con toda precisión que han disminuido las carencias sociales, las carencias en salud, carencias en educación; ha aumentado la cubertura en seguridad social, en general han mejorado los indicadores de seguridad social en México, en los últimos años que ha gobernado el Partido Acción Nacional”.

— Más allá de las cifras, ¿cuál es el sentir real de las familias mexicanas?

“Por supuesto que todas las familias en México queremos que haya mayor prosperidad, que haya certeza, que cada vez nuestros ingresos nos alcancen para más cosas. Que tengamos mayor posibilidad de tener mejores sueldos, por supuesto que también sé que las crisis económicas a los primeros en afectar son a las familias más pobres, y las familias más pobres también son las últimas en sentir la recuperación económica. Pero precisamente por eso hay que actuar con responsabilidad, conducir la economía de una manera responsable”.

Cordero insiste en referirse al pasado priista como lo peor que ha enfrentado el país en materia económica:

“Aquí no hay atajos, cada vez que hemos intentado tomar un atajo, le ha costado carísimo a este país, hemos perdido la posibilidad muchas generaciones de mexicanos de construir un patrimonio, de construir un porvenir, y ahí están los ejemplos de lo que pasó en México en los años setentas, ochentas y noventas”.

— Su gobierno sería continuidad del actual sexenio, ¿todo se hizo bien en la administración de Felipe Calderón?

“Mira, yo diría que hay resultados muy importantes en estos once años de gobierno (panista), están allí a la vista de todos, y te voy a mencionar únicamente dos que me parecen que son muy contundentes”.

Enseguida recurre de nuevo a los comparativos que siempre trae bajo la manga: “Antes de que gobernara el PAN, había 49 millones de mexicanos que no tenían acceso a los servicios de salud, y hoy con el Seguro Popular lo tienen”.

Continúa: “En estos once años de gobierno del PAN ha construido más vivienda para familias de ingresos modestos, familias pobres, que lo que se construyó en 70 años. Yo creo que esos son datos que hablan por sí solos”.

Y acepta: “Por supuesto que hay retos pendientes, por supuesto que hay cosas que se pueden hacer mejor, por supuesto que hay temas que se tienen que resolver, de eso no hay duda. Habrá que hacer la tarea de una mejor manera, avanzar más rápido”.

En el tema de la seguridad pública, Ernesto Cordero trae el mismo discurso que los otros contendientes panistas. Mantener la estrategia de Calderón, con sutiles acotaciones en el discurso. Pasar a una segunda etapa, “donde se fortalezcan las instancias policiacas a nivel estatal y municipal; una mayor participación ciudadana en la ratificación de procuradores, fiscales, jefes de Policía, secretarios de Seguridad Pública”.

— Pero los mexicanos ya estamos muy desconfiados, muy apáticos…, se le plantea.

“Por supuesto que sí, y eso hace más interesante participar en política, eso nos exige un mayor compromiso de congruencia y de hablar con la verdad, y de que nos exijan que no nos apartemos de nuestras proposiciones y de nuestra manera de hacer política. Yo creo que es un reto importante.

“De mi parte, yo siempre digo que hay que salir a convencer a los jóvenes que sí vale la pena participar democráticamente para hacer política, que las decisiones que se van a tomar el primero de julio nos van a afectar de manera muy directa, que en el próximo Presidente de México está en juego que haya oportunidades de empleos para ellos, que tengan posibilidades de conformar un patrimonio, una familia; eso es lo que está en juego.

“Decirle a la sociedad que ha perdido la fe en la vida pública del país, que la democracia es una conquista que nos ha costado mucho trabajo a los mexicanos, el que hoy podamos hablar con toda libertad, que haya elecciones democráticas, que podamos elegir a nuestros gobernantes… y eso es lo que debemos conservar y tener presente”.

UN CORDERO ECHADO PA´LANTE

Ernesto Cordero, quien ha sido el patito feo en la contienda interna del PAN, y ha cargado con el estigma de ser candidato de Los Pinos, intenta contagiar renovados bríos, ahora que está a un par de semanas de la elección interna.

Antes de iniciar la entrevista, el ex funcionario estira una mano a los reporteros de ZETA y con la otra sostiene una Coca-Cola de dieta. Sonríe y exhibe sin recato sus nuevos dientes, más grandes y brillantes.

“La mejor evidencia de que el PAN es democrático y no hay candidatos oficiales, es que somos tres aspirantes los que estamos buscando ser el candidato del Partido de Acción Nacional”, defiende ante el señalamiento de su presunta imposición. “La mejor muestra también es que Roberto Gil, secretario particular del Presidente, está con Josefina; está en legítimo derecho de hacerlo, es muy respetable”.

Al renunciar a la Secretaría de Hacienda para embarcarse en la campaña interna de su partido, Ernesto Cordero, como también lo hace Josefina Vázquez Mota, se muestran menesterosos. Se intimida y ríe nervioso cuando se les pregunta cómo solventan su proselitismo, o de qué vive sin devengar un sueldo por ahora: “¿De qué vivo?… De mis ahorros. Mi esposa es arquitecta y estamos… pues… utilizando, ahora sí que rompiendo el cochinito”.

— ¿De dónde salen los recursos para su campaña?

“Son donativos de compañeros del PAN que creen que este proyecto es el que vale la pena impulsar, que vale la pena financiar, y están sujetos estrictamente a los topes que marca la Ley. Rendiremos cuentas a lo que marca la Ley y el IFE”.

— Hasta ahorita ¿cuánto se ha gastado en su precampaña?

“No, pues, la verdad no tengo el dato…”.

La imagen de Ernesto Cordero es diferente, transmite más jovialidad, menos formalidad que la que proyectaba como secretario de Hacienda, y es evidente que los recursos o “donativos” de sus compañeros también le han alcanzado para intentar mejorar su aspecto físico.

“Vengo siendo el mismo, probablemente sí tengo algunos kilos de menos, a lo mejor estoy corriendo más por las mañanas”, responde con modestia. “Me peino mejor, seguramente, pero sigo siendo el mismo: menos trajes, menos corbatas que las que usaba cuando era secretario de Hacienda”.

— ¿Se cambió la dentadura?

“También…también. Allí hemos estado dándonos un retoque…”.

— Se ha comentado que Ernesto Cordero tardó mucho en creérsela que era el precandidato…

“No, yo siempre me la he creído. Creo que el PAN necesita gente congruente, hay muchos panistas que creen que se puede hacer política de manera honesta, de manera definida, y con este ánimo yo tomo la decisión de renunciar a la Secretaría de Hacienda para empezar este proyecto. Ya estamos a muy pocos días de confirmar la victoria en las urnas dentro de la militancia de Acción Nacional. La verdad estoy muy entusiasmado, echado pa’delante”.

— En base a las encuestas, Josefina Vázquez Mota está muy segura de que ella será la electa, que no hay vuelta de hoja…

“Pues… hay que recordarle lo que pasó con Santiago (Creel) hace seis años, cuando las encuestas también le daban una muy clara ventaja, y a la hora de la votación pues la militancia eligió a Felipe Calderón”, sentencia y amenaza con dedicatoria a Vázquez Mota.