23.8.10


REYES HEROLES:
POLÍTICA Y NARCOTERROR
Dice que por lo pronto no hay otra opción que el ejército en las calles

Todavía en la palestra las noticias de un candidato a gobernador en Quintana Roo arrestado por presuntos nexos con el narco; un aspirante a alcalde asesinado en la frontera, otros políticos de menor escaparate pero también amenazados en distintos municipios del interior de la República, y la gota que desbordó el vaso, la ejecución del abanderado del PRI para la gubernatura de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú; son para el analista político Federico Reyes Heroles signos inequívocos de la violencia desbordada en que se sume México.
Aún no ocurría lo de la explosión de un auto bomba en Ciudad Juárez, por ejemplo, pero en plena jornada electoral en cierne, en entrevista con ZETA el también escritor se refería al clima nacional: “Son casos que sí nos hablan de lo vulnerable que es el juego político en una situación de narcoterror”.
Se consolaba mientras tanto Reyes Heroles: “Qué bueno que tenemos financiamiento privado en las campañas, porque si no ahorita estaríamos dudando de dónde vienen los dineros”.
Mas acotaba: “Pero lo que no hemos bloqueado son las precampañas. En Transparencia Mexicana –de donde es presidente consejero– hemos insistido desde hace años que tenemos que ponerle candados a la etapa de las precampañas, que es donde se construye la imagen pública de los que después llegan a ser candidatos. No es tan complicado, se trata de mecanismos de tipo civil, hay que implementarlos y extenderlos”, explicó.
En el caso particular de Diego Fernández de Cevallos, secuestrado desde hace un mes cuando la entrevista, Reyes Heroles descalificaba el que la PGR se hubiera retirado de las investigaciones, fuera cual fuera el motivo: “Pone en crisis la imagen de las procuradurías, que además están obligadas por ley a investigar. Mientras no exista independencia total del órgano fiscalizador de los Ministerios Públicos, que viene contemplada en la nueva ley, el Ministerio Público seguirá siendo un elemento perverso en la vida penal de nuestro país”.
Refiere un ejemplo que, involuntariamente, lo remite de nuevo al tinte político: “Hay que darle total autonomía –al MP– para que estén fuera las dudas de qué sí se hizo y qué no se hizo. Ahí vea usted el caso de la guardería ABC, es lo mismo, ¿procedió realmente la procuraduría estatal? ¿O no procedió? ¿Por qué no hay responsables a un año de distancia?...”
Luego se lamenta con ganas: “Me da mucho coraje que el Legislativo no haya aprobado la Ley de Seguridad Nacional”. Y prevé que no se aprobará durante la gestión de Felipe Calderón “porque están muy politizados los tiempos”.
Otro elemento agravante que observa el politólogo es la falta de control de las policías locales y estatales, la descoordinación que ahora ha aumentado entre municipios del mismo estado y todo porque los gobiernan partidos diferentes. Por eso recurre a la figura de una sola policía nacional que “no sé si sea la panacea, pero es mejor que toda la descoordinación que hay ahora”.
Mientras tanto, es tajante y breve su conclusión respecto a la decisión de que sea el ejército quien se enfrente contra el narco: “No había otra opción”.
— ¿Esta crisis de inseguridad cómo se va a reflejar en la elección de 2012?, se le cuestiona para finalizar
“Pues, mire, no es claro que vaya a ser un costo para el partido en el poder, la gente sigue apoyando al Presidente Calderón. En las encuestas de opinión pública piensan que su política de seguridad es la correcta. No es claro que le vaya a ser un peso, un lastre”.

(Juan Carlos Domínguez)

No hay comentarios.: