12.1.10


CAMBALACHE DE FUNCIONARIOS
Ambición política origina cadena de renuncias y reemplazos

Como chapulines en comal caliente, sigue la brincadera de funcionarios panistas de un puesto a otro, tanto en el Gobierno Municipal como en el Estatal, ante la ambición de competir por un puesto de elección popular, léase alcaldía o diputación. Poco les ha importado la supuesta advertencia del Gobernador José Guadalupe Osuna Millán en el sentido de que “el que se va, ya no regresa”. Los funcionarios municipales, la tienen más fácil, dejan el cargo cuando sólo les quedan 11 meses para que concluya, así que la desbandada ha sido sin pudor alguno.
La ambición desmedida de los políticos –panistas, pues son los que tienen el poder– no sólo origina el obligado cambio en el puesto que ocupan, sino en la dinámica de las negociaciones, amarres y compensaciones, la cadena de reemplazos se convierte llanamente en un cambalache de funcionarios. Sólo se han detenido un poco en presentar su renuncia o solicitud licencia, sobre todo en el municipio de Tijuana, los que aún tienen la incertidumbre que pende de los acuerdos de las dos corrientes en disputa; las de José Guadalupe Osuna Millán/Francisco Blake y Jorge Ramos/Jesús González Reyes. De ahí en fuera, todos andan con el mecate suelto.
Hasta el cierre de esta edición el último en presentar su renuncia fue Leonardo Fernández Aceves, delegado de La Mesa, que buscará la candidatura por la diputación del distrito 10 local. Se aventó al ruedo pese a que se enfrentará al que a toda costa quiere el Gobernador que sea el candidato para ese distrito: Máximo García López, hasta hace unos días su secretario particular, silla que ahora ocupará José Andrés Pulido Saavedra, que era representante del Gobierno de Baja California en el Distrito Federal. Otro que renunció apenas el miércoles, es Javier Castañeda Pomposo, director de Desarrollo Social Municipal en Tijuana, que buscará esa alcaldía. Quiere el mismo cargo y debe renunciar también, Alejandro Monraz Sustaita, delegado de la Secretaría de Economía, pero le estará “midiendo el agua a los camotes” hasta este fin de semana. En Rosarito buscará ser candidato del PAN a la alcaldía Raúl Leggs, Secretario del Gabinete Estatal, quien dice va a la segura, por ello a Ricardo Sánchez Jiménez, que también buscaba ser alcalde y cobraba como Delegado de la Secretaría General de Gobierno en Rosarito, lo “consolaron” con el puesto de titular del Registro Público de la Propiedad y el Comercio, continuando la cadenita, pues al entrar Sánchez salió Víctor Lujano Sarabia, que competirá por la candidatura para diputado en el Distrito 1.
Tras la búsqueda de la candidatura a la alcaldía de Mexicali renunció Raúl López, Secretario del Ayuntamiento, que va con la venia del Secretario de Gobierno. Por ello la sigue pensando y no ha pedido licencia, otro que aspira a lo mismo, pero tendrá que invertir recursos para saltar la ley antichapulín, el diputado Francisco Rueda.
En Ensenada, aun a riesgo de quedarse sin cobrar del presupuesto oficial, renunciaron dos funcionarios del orden estatal. Fue más fuerte su sueño por la presidencia municipal del puerto. Hugo Zepeda Balereza, dejó la dirección de la Comisión de Servicios Públicos de Ensenada; e hizo lo propio Rogelio Haros Guzmán, ahora ex director del Registro Público Estatal. Mientras que en Tecate, el empresario entrado a funcionario estatal, Alfonso Álvarez Juan, abandonó la subsecretaría de Desarrollo Económico para buscar la alcaldía.
La estampida de los chapulines, en el caso de las delegaciones en Tijuana, se manifestó apenas al iniciar el año. Aparte de Fernández Aceves en La Mesa, renunció el delegado de Playas, Manuel González Reyes, que buscará la candidatura del distrito 11; en su lugar el cabildo aprobará la entrada de Blanca Fabiola Pizá, ex regidora precisamente en el Ayuntamiento de Jesús González Reyes. Se fue Héctor Juárez Pacheco, delegado en el Cerro Colorado, para buscar el distrito 11; entra Ricardo Ernesto Mann. Y aunque no para buscar un cargo de elección popular, pero sí para seguir cobrando como funcionario público, José Araiza dejó la delegación del Centro para buscar cobijo en oficinas del Ayuntamiento, se dice que como titular de Sindicatura.
La renunciadera y cambios de funcionarios del PAN parecen no tener fin. Y apenas empieza. El delgado de González Ortega (Palaco) en Mexicali, buscará candidatura para el distrito 4; el director de Desarrollo Social en ese Ayuntamiento, Rubén Alanís, irá por el distrito 3; Aarón Aguilera, delegado del INEA, se fue en busca del distrito 2; Basilio Alfredo Martínez dejó dirigencia de su partido y ahora es precandidato para la diputación en el distrito 2; Fernando del Rayo era titular de Promotora Estatal de Desarrollo, y ahora va por el distrito 5; Rogelio Aros del Registro Público Estatal quiere ser diputado del 15. En los próximos días, entre muchos otros, renunciará Óscar Zumaya en la subsecretaría de Gobierno y buscará candidatura para el distrito 9, mientras que Jorge Cornejo, secretario particular del director de Issstecali, buscará ser candidato en el distrito 13.
Hasta los priístas, aun con pocos puestos públicos les alcanza para especular con los mismos. Los diputados locales Enrique Acosta Fregoso y Humberto López Barraza, pedirán licencia para candidatearse por la alcaldía de Mexicali. En Rosarito Javier Hernández Tovalin, como “va por la libre” para la candidatura a munícipe, dejó la Secretaría del Ayuntamiento. Hasta los dirigentes de partido en el PRI dejarán la oficina en búsqueda de candidaturas; el líder estatal René Méndivil en Tijuana; así como los dirigentes municipales Enrique Esquivel Haros en Rosarito y Alfonso Garzón Zatarain en Ensenada.
Lo dicho, un real cambalache, palabra que por cierto, el diccionario define como “trueque de cosas de poco valor. El trueque se hace con afán de ganancia y suele ser malicioso; de ahí el sentido despectivo del término”.


(Juan Carlos Domínguez)

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