11.3.11


LA CERRAZÓN DE BUSTAMANTE
Acusan que el alcalde no quiere echar a operar correctamente la Dirección de Asuntos Religiosos.

“El partido ganó por el voto de la comunidad cristiana”, asevera tajante Fernando Ruiz Castillo, secretario general adjunto del Comité Nacional del PRI, a propósito de la administración municipal de Carlos Bustamente, quien no reconoce el hecho y no le da la relevancia que implica la Dirección de Asuntos Religiosos.
Ruiz Castillo, uno de los tres secretarios adjuntos a nivel nacional y que dentro del tricolor encabeza la cartera de religiones, denuncia la total cerrazón del XX Ayuntamiento, para un proyecto que se ha incubado con éxito en entidades como Chiapas, Tabasco, Veracruz, Oaxaca, Puebla y el Estado de México; y que va por buen camino en los municipios de Ensenada, Mexicali y Rosarito. Se trata del trabajo de asistencia social que implica la coordinación de Asunto Religiosos dentro de la estructura gubernamental, y que va desde la ayuda alimenticia, la donación de casas, los programas de rehabilitación contra las drogas, la impartición de cursos de valores y más, que encabezan los mismos ciudadanos cristianos, y que del gobierno nada más requieren la estructura formal: “El Municipio no nos da; nosotros aportamos”.
La comunidad cristiana en todo el territorio nacional se estima en 25 millones de mexicanos adultos, 260 mil en el estado; 125 mil en Tijuana. El programa que plantea Ruiz Castillo por ejemplo contempla el otorgamiento de hasta 3 mil casas para tijuanenses de escasos recursos, una iniciativa de proveer de 3 comidas al día a una familia de cuatro miembros, con recursos que aportan asociaciones altruistas extranjeras, así como recursos del Ramo 33 y Ramo 28. Pero el secretario adjunto del PRI en ese tema, acusa que el Ayuntamiento de Tijuana solamente contempla la dirección de Asuntos Religiosos como un asunto meramente de relaciones públicas, con una titular, Adriana Padilla, que nada más le interesa tomarse el té con los pastores, y una estructura de cinco empleados que “nomás cumplen con sus ´horas nalga’”, es decir, calentar el asiento.
La coordinación de Asuntos Religiosos empezó a operar en la administración municipal del priísta Jorge Hank Rhon, pero acusa el secretario adjunto del PRI nacional que ese ayuntamiento echó a perder el proyecto porque de entrada no cumplieron con el plan de trabajo pactado: “Hank la hizo pedazos, le dio las zancadillas, hicieron puras groserías. Con Jorge Ramos del PAN, siendo una iniciativa gestada desde el Revolucionario Institucional, peor tantito, la dejó vegetando”.
Ahora, con el regreso del PRI a los gobiernos municipales de Baja California, la expectativa de Fernando Ruiz Castillo era otra, pero ha resultado pura frustración. Por lo menos en Tijuana, porque afortunadamente con Enrique Pelayo en Ensenada, Javier Aguirre en Rosarito y Francisco Pérez Tejada en Mexicali, “ya estamos trabajando” en la coordinación de Asuntos Religiosos. En Tijuana, Ruiz Castillo permaneció 15 días, pero fueron puras vueltas, evasivas y rechazos, incluso con la síndico procuradora, Yolanda Enríquez, duró en la antesala 4 horas, para que a la mera hora la funcionaria apenas si le entendiera lo que proponía, y en el colmo, hasta desconocer le dijo quién era Humberto Moreira, precisamente dirigente electo del PRI nacional, su partido.
El comité nacional del PRI propone al joven Julio César Zavala, elemento de la sociedad civil y de la comunidad evangélica, que cuenta con el perfil para servir a ese sector de la comunidad. “Es muy joven”, ha sido el primer argumento del alcalde Carlos Bustamante para rechazarlo. Antes, habían hecho lo mismo con otra propuesta presentada por Ruiz Castillo, pero ése no les gustó por su nivel de estudios, maestrías de Harvard y Yale; “lo que quieren son personas que no piensen”, asevera Ruiz Castillo. Hay que apuntar que para ocupar la titularidad de la Dirección de Asuntos Religiosos se busca a personas de la sociedad civil, en particular miembros de la comunidad cristiana. Ése parece ser uno de los principales “ruidos” con los que el gobierno municipal reacciona, que no sea un puesto político o de prebenda para los incondicionales: “¡Como no somos pulpos chupeteadores!...”, remata el priísta.

(Juan Carlos Domínguez)

No hay comentarios.: