LA POLÍTICA ALEGRE

Juan Carlos Domínguez

OBRAS POR VOTOS

El que no sale de su oficina ni para tomar el aire –además de que está muy cómodo con el aire acondicionado- es Miguel Medrano, director de Desarrollo Social Municipal en Tijuana. Bueno, en realidad Medrano está pegado a su escritorio, pues está a todo lo que da, haciendo cuentas, restas y sumas para repartir el presupuesto y ver cómo se gastará la partida del Ramo 33, Hábitat y otros, pues sabe que entre más obras, más ganancias y más votos. Mientras tanto las decenas de personas humildes que todos los días llegan a la dependencia reniegan que siempre les dicen “el director está muy ocupado”. Es tanta la gente que ya hasta sillas pusieron en los pasillos externos.

EL PODER DE LAS DESPENSAS

Hablando de cómo se las gastan en esas dependencias de Desarrollo Social, pero ésta correspondiente al Gobierno del Estado, está el caso de Miguel Osuna, subdirector en Tijuana de esa área. Cuentan sus promotores que desde que se alborotó Osuna con eso de que quiere ser candidato a diputado por el distrito 5, anda llevando agua a su molino, bueno, no precisamente agua, sino despensas, y en lugar de al molino, a sus bodegas. De los trailers y trailers que llegan cargados de despensas, lo ven escoger y escarbar para entregárselas de preferencia a las doñitas de, precisamente, el distrito en el que sueña postularse. Si no es ahora ¿cuándo?, dice.

CABILDO CALIENTE

El PIRE (Programa Integral de Repavimentación) de Jorge Ramos sigue haciendo llorar a algunos, y en renegar a muchos. En la última junta de Cabildo el tema suscitó un encontronazo entre los regidores Eduardo Enrique Parra del PRI y Claudia Ramos del PAN, y precisamente hermana del ex alcalde. A votar en contra la fracción panista respecto a la ampliación del presupuesto para la Secretaría de Finanzas, el priísta Parra reviró reprochando el Programa del PIRE como consecuencia de tanto derroche, entonces la regidora Ramos explotó defendiendo el proyecto estrella de su hermano, argumentando que el mismo benefició a muchas colonias, a muchas familias. Lo hizo a punto de las lágrimas, con la voz entre cortada, en un estado de susceptibilidad que, cuentan, la tiene así por la detención de su marido en Estados Unidos, acusado de una operación fraudulenta con terrenos. Otro beligerante en la junta de Cabildo fue Erwin Areizaga, el PAN, quien le pidió más respeto al señor Alcalde, pues ante cualquier intervención de los panistas Carlos Bustamante hacía gestos de ¡Ay cómo… joroban!, el panista pidió más respeto. Y, para variar, Ricardo Franco, el regidor invisible, no solamente no apoyó a su fracción, sino que ni siquiera apareció en la sesión.

BURÓCRATAS URGIDOS

La presión apenas empieza, amenazó Martín Plascencia, líder de los burócratas en Tijuana. Y todo porque el Gobernador José Guadalupe Osuna Millán está aferrado en no soltarles solamente 4 milloncitos de los 45 que autorizó el Congreso del Estado para salarios de los trabajadores al servicio del Estado. Lo que más lamenta el líder sindical y sus agremiados es que los operadores políticos del Gobernador –léase Cuauhtémoc Cardona, entre otros- sirven para maldita la cosa. Dice que qué necesidad de parar labores cuando tantas ganas de chambear traen los burócratas.