HUGO TORRES CHABERT:
"ROSARITO ERA DE LOS CRIMINALES"

Ha dirigido por doce años los destinos de Rosarito, en dos periodos como delegado y en dos como titular del Ayuntamiento, pero aun así, asegura que no entró a la alcaldía por político sino por el cambio, para desligar a la administración pública del narcotráfico. Aclara que no era ni es activista del PRI, pero agradece a ese partido la oportunidad. También en entrevista reflexiona que sus problemas internos fueron exclusivamente con el Síndico, quien es simpatizante de Antonio Macías, uno de los dos alcaldes que fueron mencionados por un narcotraficante como beneficiarios y que –desafortunadamente dice Torres– no fueron objeto de un “michoacanazo”.

Hugo Torres Chabert no tiene futuro político.
No es una apreciación del editor, de hecho, es una declaración de principios del todavía alcalde de Rosarito.
Confiesa que llegó por segunda ocasión a dirigir los destinos del quinto municipio debido a una necesidad empresarial. Particularmente para combatir la inseguridad.
“Rosarito estaba entregado a los criminales”, afirma tajante el priísta.
Reconoce don Hugo que el quinto municipio –no su gobierno– padeció la falta de credibilidad por culpa de los señalamientos contra los dos ex alcaldes anteriores, que fueron vinculados con el narcotráfico. En estas condiciones lamenta que en Rosarito no se haya dado un “michoacanazo” (acción del gobierno federal de detener a alcaldes y funcionarios mayormente de otros partidos por presuntos vínculos con el crimen organizado).
De hecho, ya entrado en el análisis de la conducta de los representantes del PAN, Torres Chabert asegura que la derrota electoral del 4 de julio, donde ese partido perdió todo, se debió precisamente a no reconocer que gobiernos de Acción Nacional están asociados con el narco.
En cuanto a haber sido el único alcalde priísta en este trienio, dice que no hubo afectaciones mayores, aunque en ocasiones los gobiernos federal y estatal sí le escamotearon recursos.
A continuación la entrevista con el alcalde saliente de Rosarito.
—En su momento a usted le tocó presidir el primer Consejo municipal de Rosarito, pasan tres administraciones panistas y le toca otra vez encabezar ¿Qué diferencia hubo de aquel Rosarito a éste?
“En aquel Rosarito todavía se amarraban los perros con longaniza, no existía el peligro de la inseguridad, la prioridad en ese momento fue el resultado de la municipalización y, por lo tanto, organizar el gobierno para que funcionara como un gobierno municipal. No hubo elecciones, fui designado del Congreso. Tratamos de organizar las dependencias porque no había tesorería, no había catastro inmobiliario, no había las dependencias que un municipio tiene y que son la base de su sustento y de su administración. Ésa fue la principal encomienda.
“En ese tiempo la seguridad pública no era el problema más grave, sí había que atender el problema de inseguridad, sí había robo domiciliario, pero no había el conflicto grave de policía ligado con el narco, cuando menos no era tan abierto, ni ostentaban ni se sabía de esa situación. Entonces fue organizar, echar a andar el gobierno, establecimos seis hectáreas para un parque deportivo, el Reforma, que ahorita estamos acondicionando con más instalaciones, empezamos a pavimentar, se pavimentaron más calles en ese año que todos los años anteriores juntos de cuando era delegación”.
—Usted fue postulado por el PRI, pero se ha asimilado más como un candidato ciudadano.
“En ese momento, además que yo no era ni soy activista del PRI, en ese momento el Congreso me escogió por haber promovido la municipalización.”
—Ya en esta administración, incluso formó un equipo incluyente con gente del PAN y de otros partidos. ¿Eso no le trajo más desventajas que ventajas?
“Entre los funcionarios no hubo ninguna desventaja. Los funcionarios congeniaban lo que tenían que congeniar, si había un problema, se separaba. El problema fue más bien con la elección popular, específicamente con la sindicatura, que no toleraba que hubiera ninguna persona no afín a su modo de pensar.”
— ¿Fue un gobierno de muchos pleitos?
“Fue un gobierno nada más de pleitos con el síndico, no hubo muchos pleitos entre un funcionario y otro, todos coordinaban a la perfección, no había problemas, por más que se decía que los funcionarios del PAN que estaban en tesorería y finanzas no pagaban, pues no era porque estaban antagónicos, sino porque no reunían los requisitos para que se pagara o porque no había fondos en ese momento y se posponía el pago, o sea que realmente todo se quedaba aclarado, no fue más que la exageración en algunos medios. Pero sí hubo antagonismo total, desde el principio, de sindicatura, con algunos funcionarios que venían de gobiernos anteriores no afines al grupo de Antonio Macías, que es con el que más simpatizaba…, simpatiza nuestro síndico.”
—Se llegó a tachar su gestión de que a veces parecía más panista que priísta.
“Aquí exactamente, cuando yo entré al gobierno vi el equipo de priístas para ciertos puestos y vi el equipo de panistas, y dije voy a eliminar el color y voy a ver el perfil de capacidad y de honradez; y con ese lado me fui, y entraron priístas muy valiosos y entraron panistas que habían trabajado con gobiernos panistas, y gente que ha trabajado con ambos gobiernos, como el secretario de administración urbana actual, un ciudadano que trabajó conmigo cuando yo era delegado municipal, que ya había estado aquí, éste es mi doceavo año al frente del gobierno municipal, dos periodos delegado y dos de gobierno municipal, él entró a trabajar conmigo en los ochentas, cuando era estudiante, y lo volví a considerar ahora para que entrara a trabajar conmigo en este gobierno, pero no por su color, sino más bien por la confianza”.
—Y su perfil de empresario ¿cómo repercutió en la administración pública?
“Yo entré a esta administración pública por necesidad empresarial, estaba viendo cómo se iba abajo la seguridad en Rosarito, cómo se perjudicaba el turismo, no quería venir, se notaba la delincuencia saliendo de la policía, limpiaban el bulevar para que se hicieran acciones de secuestros y todo esto por orden del jefe de la policía, el asesinato de Bowser, jefe de la policía, el camión aquel de mariguana que llegó en el segundo ayuntamiento y lo soltó la policía porque recibió una llamada, entonces son cosas que la ciudadanía estábamos viendo que vivíamos aquí todos los días, no nos había cundido la alarma tanto hasta que vimos el descenso de la economía, el turismo principalmente, entonces decidí entrar al gobierno, pero no por nada político, porque no soy político ni tengo intereses ni presentes ni futuros, yo quería entrar para limpiar, con la corporación, llevar a cabo un cambio en ese aspecto y desligar al gobierno municipal del narco, ésa fue mi razón.”
—De hecho entró en el momento de peor crisis de inseguridad.
“Pero entré por ese motivo precisamente, no me tomó a mí de sorpresa, venía por la inseguridad, a combatirla, me tocó de sorpresa lo grave de la contaminación de seguridad, porque cuando estaba afuera consideraba que la policía tenía un 20 ó 30 por ciento de corrupción, pero fue que el 70 por ciento no era recomendable, entonces sí estuvo más grave de lo que pensaba y tanto es que ocurrió el atentado encabezado por policías contra el jefe de policía señor Montero. Luego en el siguiente año salió la noticia a través de un medio (ZETA), del Candelario, que había pagado 500 mil dólares a los alcaldes del segundo y tercer ayuntamiento para ciertas canonjías que esperaba que le dieran a cambio, obviamente estábamos entregados, el pueblo, los ciudadanos, las calles, todo estaba entregado a los criminales para que actuaran. Había que hacer un cambio, el problema ahora es ver que ese cambio perdure.”
—En cuanto al número de policías, se hablaba que eran insuficientes, había como 155 y se requerían como 350. ¿Ahorita cómo andan?
“Ahorita tenemos el número de policías más alto del estado por habitante, nunca son suficientes los policías. Sin embargo la cantidad de policías que teníamos eran 149, ahorita subimos las plazas hasta 217, 50 por ciento más, y tenemos contratados apenas 50 de ésos, 70 más, porque pues no hemos tenido ahorita manera de meter más gente porque no encontramos candidatos que reúnan la academia y los requisitos de educación y de experiencia que deben tener”.
—Prometió también la policía turística y bilingüe; y la otra fue la policía de barrio. ¿En qué quedó ese proyecto?
“Tenemos el proyecto ya funcionando, de la policía turística, inclusive la amplié y propuse al alcalde de Ensenada y al de Tijuana que hiciéramos una policía metropolitana, con la presencia del secretario de turismo del estado, Óscar Escobedo, les propuse en Puerto Nuevo que creáramos esa policía y lo aceptaron, y después promovimos a través de las relaciones que tenía principalmente Tijuana con el señor alcalde de San Diego, Jerry Sanders, que nos capacitara a algunos elementos de la policía turística para que vinieran a capacitar al resto de las policías en cómo atender al turismo, por ser San Diego una ciudad de tanto desarrollo turístico y convenciones, entonces sí se hizo.
“Promovimos la policía auxiliar, que trabajaba libremente, a que se controlara y tuviera un reconocimiento más oficial para trabajar mejor en la atención del reporte de problema de robo domiciliario principalmente. También para robos domiciliarios hicimos dos cosas: una, promovimos las reuniones de coordinación del Ejército y Procuraduría, que se establezcan leyes para reglamentar las casas de empeño, para que pidan comprobantes de propiedad de lo robado y cando lo vayan a sacar también lo comprueben, con el objeto de que no sea un lugar de lavado de dinero, inclusive había casas de cambio que cerramos porque abrían 24 horas, se les puso su horario limitado, también para prevenir el robo domiciliario creamos 300 puntos de chequeo. Y aparte de la policía turística promoví dos puestos más: uno del encargado de atención al turista, que es una oficina del Cotuco, de una persona que trabaja todo el tiempo para atender quejas de los turistas y hacerles gestiones en el ministerio público o en tránsito, y un Ombudsman, un abogado que está 24 horas con el teléfono para poder atender cualquier problema a cualquier hora de la noche”.
—Sin embargo ya no se levantó mucho el turismo.
“No. Cuando yo estaba de candidato pensé: ´Los americanos no vienen porque es inseguro, cuando yo regrese a Estados Unidos y les diga ya controlé la inseguridad pues me los voy a traer para acá otra vez o me llevo estadísticas`; bueno, pues no fue así, yo puedo asegurar ahorita que tenemos el municipio más seguro que hemos tenido en diez años, por los niveles de criminalidad que publica la secretaría de seguridad pública del estado, pero no ha sido suficiente con eso, el americano fue influenciado muy fuerte por las campañas que hubo en el 2008 principalmente, de cuatro cadenas televisivas de las más grandes, incluyendo CNN, Fox ,CBS y ABC, estas compañías empezaron a ver quién decía la noticia más sangrienta de Tijuana y Rosarito y muchas veces sacaban a los soldados entrando a escuelas y, junto con los niños con los rifles en la mano, en lugares de Michoacán y de Juárez, no aclaraban que no era Baja California, nos dieron una ‘quemada’ gigante, a nivel Estados Unidos, asumiendo que la frontera, y para el gringo que no conoce de geografía, le decían al sur de la frontera y aunque fuera Michoacán o fuera Juárez o fuera equis lugar, pues pensaban que era Tijuana y Rosarito. Entonces esta grave contaminación en las mentes de los americanos está todavía muy fuerte y mi trabajo y esfuerzo de ir a promover no fructificó lo suficiente. Sí hemos logrado algo, principalmente en el hispano, yo he estado en San Ana, en San Diego, en Los Ángeles, en San Francisco; en Las Vegas, junto con los consulados, en conferencias de prensa tres o cuatro veces al año con el objeto de crear confianza y regresarlos, pero se requiere una campaña estatal y nacional más fuerte”.
—De repente se dice que Hugo Torres a veces se preocupa más por promover su hotel que Rosarito.
“Claro que llegué a promover Rosarito pero no mi hotel, y yo entré a trabajar para promover Rosarito y para cuidar mi negocio, si no, no me meto a la seguridad, si yo hubiera pensado egoístamente y además mi negocio fuera más chico, lo hubiera movido de lugar, si fuera un carro de paletas lo hubiera movido a equis lugar, a Querétaro o a algún lugar más seguro, o me emigraba a San Diego, pero mi hotel no lo puedo mover, está de la fregada querer mover ese hotel, entonces dije mejor entro a corregir la inseguridad, para mi hotel, claro que al beneficiar a mi hotel pues beneficio a todo Rosarito porque ése es parte integrante, mi interés es generar el regreso del turismo a Rosarito, porque eso beneficia a todos los hoteles y al mío desde luego que también.”
—En cuanto a desarrollo urbano, también de los planes que tenía era por ejemplo el meter agua en las colonias, arreglar con la CESPE; al igual de no autorizar fraccionamientos si éstos no garantizaban la introducción de servicios públicos; más áreas verdes.
“No autorizamos ninguno de ésos y requerimos a todos los fraccionamientos que no han cumplido, hicimos una amplia campaña de mandarlos llamar y demandar a aquellos que era necesario para que cumplieran, y también publicamos un semáforo, verde, amarillo y rojo, con el objeto que la gente sepa dónde comprar y dónde corre riesgos si compra. El rojo, dónde no comprar, son fraccionamientos que ha abierto alguna gente sinvergüenza, que agarran un terreno, lo cuadriculan y se ponen a vender sin tener un permiso, muchas veces sin tener el título de propiedad, ya nos encontramos uno, de unos políticos que abrieron uno, no voy a decir el nombre para no quemarlos, innecesariamente, pero que aquí la gente sabe cuál es y que ahí fraccionaron y vendieron y están demandando para correr a los que no pagan, y ni siquiera son dueños del terreno.”—En cuanto a la introducción del agua donde hacía falta.
“Aquí la introducción del agua y el drenaje, que era uno de mis compromisos, afortunadamente coincidió con el compromiso del gobernador, gracias a eso Rosarito está al nivel de los demás municipios en agua y drenaje, porque estábamos rezagados como en el 50 y ya subimos al setenta y tantos por ciento de agua y de drenaje y eso nos permitió poder hacer el financiamiento para pavimentar todos los lugares donde hay agua y drenaje. 500 mil metros de pavimentación de concreto hidráulico y 80 mil más de asfalto.”
— ¿Eso va a quedar concluido?
“Va a quedar concluido en más de un 90 por ciento y las demás obras que están en proceso, que son principalmente el bulevar Benito Juárez y algunos bulevares como acceso a fraccionamientos alejados, estará concluido los primeros meses del próximo gobierno, ya con el pago efectuado, la etiqueta marcada para terminarlo y aprobado por el Cabildo e informado al Congreso.
—El síndico nos comentaba que “el talón de Aquiles” de esta administración ha sido el transporte público. ¿Ése es uno de los problemas que se va a heredar?
“Tenemos dos tipos de transporte y tenemos un estudio que pagamos en la UABC. La recomendación es quitar lo que hay y poner vehículos más grandes –ahorita trabajamos con taxis y calafias– para ir a Tijuana. El problema que hay es que tiene que hacerse eventualmente un convenio con Tijuana, porque hay algunos transportistas de allá que quieren venir a Rosarito, entonces ahí es cosa de determinar ese convenio intermunicipal, pero todo funciona, no está nada detenido, el día de ayer recibimos una solicitud de ampliación de una ruta que va al Tecnológico, que también quieren llegar a la UABC, que van por el lado de la 5 y 10.
“El problema de las calafias, ése es en donde están los dos gremios en conflicto, los dos arguyen que ellos tienen todo el permiso y que el otro no tiene nada, de ahí no los puedes sacar, nosotros tratamos de convenir que se llegara a un acuerdo entre ellos, pero cada quien está montado en su macho y cada uno tiene sus abogados, que son los que saben lo que están haciendo y lo que tienen a su favor o en su contra y se van más por el lado de la demanda y de ganar los problemas de ruta de uno y del otro. Sin embargo echamos dos aprobaciones indebidas que hizo el anterior alcalde para rutas, dos concesiones con cinco rutas cada una, ésas el Cabildo aprobó que se dejaran sin efecto porque habían sido dadas por el alcalde sin haber aprobado el Cabildo y sin licitación.
“Hasta ahí quedamos nosotros, en ese ínterin de una de estas cancelaciones que hicimos se amparó el transportista “Quinto Municipio” y ha estado renovando sus amparos y hasta ahorita tiene suspensión provisional, entonces está funcionando con las rutas más elementales, no se ha dejado de dar servicio a la comunidad y sí, lo ideal es que no tengan ese pleito, sin embargo desde hace tres o cuatro gobiernos lo traen, desde que empezó a trabajar “Quinto Municipio”, que le dio cabida el Primer Ayuntamiento con Silvano Abarca, desde entonces se creó ya el grupo panista, porque “Quinto Municipio” se identifica como gente alineada con el PAN”.
—Respecto a las cuentas públicas de Rosarito, en contraste con anteriores ejercicios que fueron rechazadas, en las actuales del 2008 no hay rechazadas, pero hay varias observaciones, ¿de qué tipo son éstas?
“Ya nos aprobaron la cuenta pública del DIF por primera vez en la historia de Rosarito; nunca habían aprobado las tres cuentas del DIF; Ingresos, Egresos y Patrimonial. Salió el DIF muy contento y con una ‘estrellita’ en la frente. Cuando entré tenía el DIF un pasivo de 4 millones y estaba muy desorganizado, hicieron un cambio notable ahí. Al Municipio nos aprobaron el 2008, la única que se ha aprobado en todo el estado, nos aprobaron Ingresos y Egresos. La cuenta Patrimonial, no obstante que reconocen lo que avanzamos, no está terminada al cien por ciento, eso se debe a que heredamos inmuebles de Tijuana que no tienen título, y la cuenta patrimonial implica que tenemos que identificar cada bien inmueble con su escritura; bienes que nos heredó Tijuana, donde estaba la policía municipal en el centro, por ejemplo¸ y otros bienes sin título, ahí nos vamos a quedar con la aprobación parcial de la cuenta pública Patrimonial”.
—Se recibió este Ayuntamiento con daños patrimoniales, con juicios perdidos y deudas. Al inicio de su gestión se temía que a lo mejor esto afectaría a la hora que la Federación otorgara partidas presupuestales. ¿Finalmente afectó?
“Eso no afectó tanto porque nos trataron bastante bien en esas partidas. Sin embargo yo considero que nos afectaron de una manera política al no darnos el subsidio del Subsemun y al rebajarnos las partidas del Hábitat, nos redujeron las partidas del último año. Creo que ahí sí intervino poquito el partidismo; desgraciadamente. Lo que no nos dieron en 2008, ya lo perdimos, al Subsemun no pudimos entrar hasta el 2009, no obstante que la inseguridad aquí era tan grave o igual que en Tijuana; porque la misma familia de los Arellano y otras operan aquí, operaban y siguen operando en algunos grados; pero ya sin la corrupción policíaca; creo que ése fue el principal logro que se dio”.
— ¿Cómo fue su relación con el Gobernador?
“Ha sido muy amable, ha sido de amistad, y él trajo aquí a sus funcionarios y a todos les leyó la cartilla el primer día de gobierno, y los comprometió a trabajar para apoyarnos. Y la mayoría sí aceptó. Pero hubo tres o cuatro dependencias que nada más no nos ‘pelaron’”.
— ¿Cuáles dependencias?
“Pues no quisiera decir todos los nombres, la verdad. Pero Desarrollo Social es una… ¡uf!, ya lo estoy diciendo –ríe–. Desarrollo Social creo yo que nos pudieron haber apoyado más en Seguridad Pública, porque ahí pudimos haber sido objeto del Financiamiento en 2008. Desarrollo Social sí repartía en Rosarito, pero directamente en su oficina, no a través del Municipio, como en otras ciudades. Y la Secretaría de Salud nos hubiera gustado que apoyara más en trabajos de fumigación, no nos llegó el apoyo en ese campo y cuando había el programa de rickettsia no nos informaron, lo dieron a conocer públicamente un año después en Ensenada; fueron “detallitos” nomás. Otra cosa que falló un poquito fue el caso del Hábitat. Pero también del lado panista tuvimos el apoyo del diputado Carlos Torres Torres, que nos apoyó con una cancha entera de futbol. Y en lo deportivo es donde consideramos uno de los mayores avances de la administración, por las instalaciones que pudimos hacer.”
—Y en torno a los señalamientos que tuvieron los dos ex alcaldes rosaritenses en relación a presuntos vínculos con el crimen organizado, ¿de qué manera entorpeció la gestión suya?
“Esos vínculos que tenían no los ligan conmigo, desde luego, ni sospechan, ni tengo nada que ver. Sin embargo sí afecta a la imagen del Municipio. Y lo que más desafortunado es, que no se dio el “michoacanazo”, debió haberse dado, creo que ahí se fueron mucho por cuidar los “colores”. Pero realmente si los alcaldes del Segundo y Tercer Ayuntamiento hubieran sido “rojos”, hubieran ido a dar a las Siedo, a la PGR, y a todos lados. Aquí no se les mandó declarar ni presentarse. Ahí sí fue una de las fallas que les influyó en la pérdida de la elección porque ese hecho fue conocido en Tijuana y Rosarito y yo creo que en todo el estado, porque el medio que lo saca –pues ya sabe usted cuál es (ZETA)– lo difunde por todo el estado y tiene credibilidad. Creo que esa derrota fue por no reaccionar a tiempo; o no reaccionar, punto; porque no se ha reaccionado. Todavía el partido azul aquí no se da cuenta de que está metido con el crimen y que si lo sigue tolerando van a salir a la próxima elección de candidatos pues… ¡Dios nos libre!”
— ¿Cómo se siente de entregar ahora la estafeta a un alcalde del PRI, además de enmarcarse en un Congreso priísta, al igual que el resto de los municipios?
“Yo creo que va a hacer un cambio en apoyo al Municipio. Lo que no nos dieron a nosotros, sino que lo manejaba el Estado, con estas ideas que trae el nuevo Congreso y los alcaldes, creo que van a dirigir los esfuerzos y los recursos al ámbito municipal”.
— ¿Usted propondría o impulsaría que repitiera Jorge Eduardo Montero en Seguridad Pública?
“Para mí Montero es la persona que cuando lo quisieron matar le hablé yo estando en México y le dije ‘¿capitán, cómo se siente?’, y me dice ‘señor alcalde, ya sé qué me va a preguntar, ¡yo me quedo!’. Y dije: ‘¡Ya fregamos!, ésta es la persona indicada’. Precisamente el atentado fue porque manifestamos él y yo que no aceptábamos ninguna recomendación y ninguna dádiva de los delincuentes. Y toda su gestión así ha sido, todos los policías que estaban infiltrados, que tuvimos la prueba porque teníamos los reportes de control de confianza, los empezó a sacar todos pa’ fuera. Y en eso estuvimos de acuerdo y trabajando coordinados, con el gran apoyo del General Duarte, y originalmente con Aponte Polito, que me recomendó al capitán, y por eso salió adelante ‘la cosa’; porque él es militar, a lo mejor es un poco ‘cuadrado’, porque luego los militares nomás ven para un camino, pero eso fue lo que salió adelante, porque no permitió que le trajeran a nadie, antes algunos funcionarios recomendaban a sus comandantes, en el gobierno anterior había varios funcionarios que ponían comandantes, entonces era una rebatinga. Tiene que haber un mando duro, tiene que ser honesto, leal y valiente; si alguien reúne esas condiciones, ‘la hace’, y ‘la hacemos’ todos”.
— ¿Hugo Torres qué va hacer a partir del 1 de diciembre?
“Pues voy a seguir siendo lo que soy, yo estoy prestado. Soy empresario y estoy prestado al gobierno, y me reclama el sector empresarial, o yo creo que me reclama, para ir a trabajar allá. No tengo carrera política, ni futuro, ni soy político. Lo he demostrado porque a veces declaro cosas que no son de política, ni tienen fines partidistas ni nada parecido. Estoy agradecido con el PRI porque sin ser activista me permitió ser candidato esta vez porque yo veía esa necesidad de entrarle a combatir a la inseguridad y el PRI compró la idea”.

Juan Carlos Domínguez