LA POLÍTICA ALEGRE
Juan Carlos Domínguez

A LA GUILLOTINA

Con eso de que a sus compañeros de partido en el Cabildo ni los fuma, vota en favor de las ocurrencias y triquiñuelas del gobierno municipal y no en contra como sí lo hacen los otros ediles blanquiazules, no contesta ni llamadas, ni radio, ni correos de sus dirigentes partidistas y demás correligionarios; por todo ello en el PAN ya empiezan a tener la ligera sospecha de que el regidor Ricardo Franco los está traicionando, al partido y a la militancia. No les extrañaría que hasta se haya vendido a la administración priista. Por eso el PAN ha llamado al también ex diputado federal para que comparezca este viernes a las 6 de la tarde ante la Comisión de Orden del Comité Directivo del PAN para que de una vez por todas explique qué se trae. Lo quieren correr del partido. En el proceso su abogado defensor será Héctor Magaña Mosqueda, ex síndico procurador en el gobierno de Jorge Ramos y bueno para zafarse culpas propias y de los suyos.

LA MÁQUINA DEL TIEMPO
La misma voz engolada, el mismo tonito, el mismo discurso, la misma actitud; fue como viajar al pasado, a los setentas y ochentas, como si nunca se hubieran ido. Así se escuchó hablar a Enrique Martínez y Martínez, secretario regional del CEN del PRI al referirse a los procesos de selección de candidatos para la elección de este año. Se refirió a la democracia interna, a los intereses del partido por encima de los personales, y toda suerte de lugares comunes. Lo más sobresaliente de su somnífera perorata fue al expresar: “La reforma que nos hace falta a todos los mexicanos, es la reforma de actitud”.

Max García, diputado PAN.

BODY SHOP
Si todo México al enterarse se ha escandalizado de Carlos Talavera Leal, funcionario federal de la Secretaría de Desarrollo Social, quien publicó en su Facebook que las indígenas con las que tienen que lidiar huelen muy feo, cuentan que al que tendrían que quemar con leña verde es al joven diputado del PAN y presidente del Congreso local, Max García. Vecinos de una estética donde religiosamente acude Max varias veces por semana, a aplicarse pedicura, manicura, mascarillas, tratamientos para el pelo y, baño completo en toda su humanidad, lo escuchan llegar vociferando por la suciedad que se le impregna al visitar colonias y saludar doñas y niños. Al también aspirante a la alcaldía de Tijuana, Talavera le queda corto al llegar cuando llega al salón de belleza a punto del colapso solicitando urgentemente se le desinfecte.

BUEN ANFITRIÓN
Viviendo sus últimos días de gloria como secretario de Gobierno del Estado, y sintiéndose en la cúspide de la popularidad, por lo menos durante un par de horas y antes de que el gobernador le dé cuello y ponga en su lugar a Raúl Leggs, Cuauhtémoc Cardona Benavides organizó hace unos días un brindis post navideño para sus compañeros panistas, y logró convocar como a 400 en el salón de eventos La Candelaria. Acudieron gustosos a dar cuenta de los tamales, champurrado, chelas y refrescos, desde el mismísimo Jesús González Reyes, próximo diputado plurinominal; hasta toda suerte de aspirantes a lo que sea: Alejandro Monraz, Leonardo Fernández Aceves, Martín Domínguez Rocha, Marco Sotomayor, Gerardo Álvarez, Max García, Rodolfo Enríquez, Gustavo Ley. La promesa también era que habría rifa de regalos, pero éstos nunca llegaron. Y en tiempo de crisis y a falta de candidaturas, muchos por lo menos querían un regalito. Pero fue más la decepción.