Peleados al interior, hasta el final decidieron candidato a alcaldía
LAS INDEFINICIONES DEL PRD

No solamente peleados y divididos los perredistas, que ya de por sí son motivos suficientes para no tener seriedad ni interés en participar para ganar en las elecciones; sino también “poquiteros”, fue lo que los llevó a registrar candidatos hasta el último minuto del plazo, dado que su pelea por los escaños de menor jerarquía –aunque muy redituables para sus ocupantes–, los llevó a darle apenas importancia a su designación de candidato para la alcaldía de Tijuana. Un día era Alberto Entebi, otro Reyna Soledad; un día pensaban en Alejandro Monraz, pasado mañana en Arturo Gónzalez Cruz. Al final, se aventaron casi con la hoja de registro en blanco. Eso sí, con las posiciones de primer regidor y primer plurinominal bien apuntadito en tinta fuerte.

A ALBERTO ENTEBI: “TÚ YA NO VAS”

El empresario en agencias de seguridad tres veces acudió a la ciudad de México donde el dirigente nacional Jesús Ortega y demás secretarios de áreas le aseguraron todo el tiempo que él sería el candidato. Un año tres meses se aventó en ese proceso, todavía faltando una semana para los registros, pese a que también había contemplado a la cantante Reyna Soledad, dice que a él ya lo llamaban todos allá “señor candidato”. Incluso que la otra contrincante, resignada a no haber sido elegida, ya ni regresó a la capital del país.
Finalmente lo sacaron de la jugada los conflictos internos entre las dirigencias municipal y estatal del PRD en Baja California; peleándose por las sobras que les otorga “la democracia electoral”. Entebi había integrado su planilla con el doctor José Ortiz Ampudia y a Víctor Morán como síndico; y había accedido poner en su lista de regidores a Hortensia Hernández, Paúl Arce, que son los que el partido le había impuesto, no tenía problemas con eso, dice. Pero el dirigente municipal, Vicente Vega quería la posición de primer regidor para su padre; y ésa fue la pelea, en la que Entebi se fue entre las patas.
En el proceso de elección la Comisión Nacional Política del PRD se lavó la manos, hicieron un burdo trámite de “a ver quién levanta la mano por éste y éste”, según relata Alberto Entebi, y finalmente Baja California a nivel nacional fue despreciada por Nueva Izquierda, más preocupada en entidades como Oaxaca o Puebla: “No les importa tener un candidato bueno, van por lo que ya tienen”; manifiesta el denostado candidato que no fue.
Según Alberto Entebi la decisión final molestó a jerarcas como Marcelo Ebrard y Dolores Padierna: “Porque yo estuve con los meros meros de allá; no puedo decir que anduve con los mugrosos de aquí; son una bola de mugrosos, muertos de hambre”.
Para Entebi ya todo está arreglado con el PAN para que el PRD pierda en Baja California. Califica la experiencia como horrible y dolorosa. Incluso ya registrada “María Enriqueta Bojórquez –porque así se llama Reyna Soledad, hay que decirlo– me han seguido llamando para que acepte de nuevo la candidatura”. Dice que en realidad la ahora candidata no desea hacerlo, mucho menos gastar “un penny” en la campaña, lo que sin duda se requerirá, pues él ya llevaba gastados 800 mil pesos.
Ahora espera que los intereses y acuerdos raros que se dieron en el PRD, no surjan ahora también como abanderado del PT/Convergencia: “Al menos que también me salgan con ‘su domingo siete’”.

A REYNA SOLEDAD: “¡ÁNDALE, TÚ!”

“Sí hubo un jaloneo muy fuerte”, expresa Reyna Soledad con respecto al proceso interno que la llevó a su designación. “Yo pienso que dentro de tantas corrientes que hay en el PRD, de cualquier forma están manejando la democracia”.
Refiere la también intérprete de “Bienvenidos a Tijuana” que le pareció “muy sano” que estuviera tan peleada la elección y que los dirigentes tuvieron razones de peso para optar por ella: “Se puso todo en la balanza, se sopesaron trayectorias, ideales, muchas cosas…”.
Incluso refiere la candidata que su postulación vino a tranquilizar las aguas en el partido, pues estaba levantando mucho polvo la precandidatura de Alberto Entebi. Acepta que debe haber algunos perredistas a los que su nombre no convenza, pero calcula que el 90 por ciento está con ella: “Siento que vamos a salir en armonía”.
Es de recordarse también que Reyna Soledad ya había declinado a postularse por el PRD, viendo la desorganización que en ese instituto impera.
Ahora se le cuestiona si tiene la confianza de que reciba el apoyo y la fuerza que se requiere para abanderar una causa tal: “Yo lo dudé mucho en el proceso de precandidatura; fui a Mexicali y renuncié. Después me llamaron de México para decirme que la propuesta ciudadana era una cuestión que les interesaba mucho; que me iban apoyar; con esa confianza me regresé”.
El apresuramiento con que se dio su registro, justifica Reyna Soledad, no le ha permitido definir su planilla. La había pensado con comunicadores como Óscar Genel, Manuel Suárez Soto o Arturo Geraldo, “con los personajes más representativos de Tijuana”, pero aclaró que sus medios no los dejan. Esperará el arranque de campaña. Confía que la misma será solventada por el PRD, por ello la planeará limitada pero efectiva en el gasto económico, convocando a mucha gente joven en las cuadrillas, así como a tijuanenses que quieran ser un factor de cambio. “Espero ilusionar a la gente con este sueño”.

(Juan Carlos Domínguez)