4.1.11


La Política Alegre
Juan Carlos Domínguez

PIOJOS
En una ocasión les dieron los tacos fríos y raquíticos, el año pasado los hicieron esperar horas para dos méndigos tamales, pero en esta ocasión, de plano “sí se volaron la barda”, expresan los “afectados”. El gobernador del Estado, José Guadalupe Osuna Millán convocó a los reporteros de Tijuana a un convivio navideño, pero ni siquiera se dignó a rentar un restaurante o contratar a un taquero, y eso que entre sus convidados estaban “estrellas” de las televisoras locales. Reunió a los periodistas en una salita de juntas del departamento de Recaudación de Rentas del Estado, ahí les puso una charola de quesitos, jamoncitos y galletitas; tortitas del Cotsco como platillo fuerte; para beber coca cola y café; no más. Es más, el Lupillo ni se dignó a sentarse, nomás vino a cumplir y soltar uno de sus acostumbrados discursos amelcochados. Sí la fiestecita no los había dejado del todo contentos, los agasajados pensaron que con la rifa de regalos el góber se iba a reivindicar, pero ¡oh! sorpresa, los premios fueron puras botellas de vino L.A. Cetto, y no precisamente de la mejor de sus líneas. Fue como un mensaje también de “si lo que querían era alcoholizarse, pues llévense su botella”. Para variar, no faltó el reportero que se erigió como la voz de la comunidad periodística, esta vez en la persona de la corresponsal Julieta Martínez, en su acostumbrada prepotencia le reprochó a Osuna Millán que estaba bien que pensara en ellos para estos convivios, que se agradecía, pero que por favor tenga más respeto para el gremio ya que es muy dado a agendar entrevistas y luego los deja con un palmo de narices.

A TODO LUJO
Lo que es no tener carencias. Es más, se trata del buen gusto y, claro, tener con qué pagarlo. Contrario a la austeridad del Gobierno Estatal panista –y eso que aún le quedan 3 años- , David Saúl Guakil, secretario de Desarrollo Social del Ayuntamiento priísta de Tijuana, convocó y pagó un convivio para su área, así como a invitados especiales de la actual administración, nada menos que en el Sky Bar de las Torres New City. A todo lujo, pues. A todos les quedó claro lo refinado en los gustos que es el funcionario que precisamente tendrá que atender día a día a los descalzonados que llegan a Palacio Municipal pidiendo apoyo para lo mínimo indispensable. En su convivio navideño, hubo mucho invitado de lujo, hasta los “cuatro fantásticos azules”, que no son otros que los cuatro regidores panistas que como niños huerfanitos no hay evento al que no lleguen tomados de la mano: Claudia Ramos, Erwin Areizaga, María Luisa Sánchez y Ricardo Franco.

ESPÍRITU NAVIDEÑO
Muy sensibilizado por la época decembrina, el bajacaliforniano ahora flamante subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, Juan Marcos Gutiérrez, convocó a una posada navideña a diputados y demás ilustres panistas en la Ciudad de México. Hubo piñata, colación, villancicos y Juan Marcos, nada tonto, cobró la entrada. Pero lo más conmovedor fue que el mismo anfitrión derrochó sus capacidades histriónicas interpretando a varios personajes de la tradicional pastorela. Dicen que el talento artístico lo heredó de su madre, Julieta Gónzalez Irigoyen, declamadora senil y “vaca sagrada” de la cultura tijuanera.

No hay comentarios.: